Los Mossos d’Esquadra dan por desalojado los bloques ocupados del Kubo y la Ruina. El operativo, que estaba en marcha desde las seis de la mañana, ha despertado cierta expectación mediática. Un centenar de personas, entre activistas y vecinos, se han congregado en la plaza Bonanova, a pocos metros de los espacios ocupados. El ambiente a la Bonanova, tranquilo salvo algún grito a favor o en contra de los ocupantes o la policía. Excepto algunos enfrentamientos a primera hora, el desalojo se ha llevado a cabo sin incidentes remarcables.
Siete furgonetas de la BRIMO ha protagonizado el lanzamiento. Los Mossos antidisturbios han conseguido acceder arriba de la azotea, donde esperaban los ocupantes. La policía ha entrado por la parte subterránea del edificio a primera hora, que todavía era oscuro en el barrio de la Bonanova, y ha inspeccionado el espacio «para trabajar con seguridad». Las dos plantas más bajas estaban aseguradas y los Mossos han ido accediendo a los pisos superiores. Según apunta la policía, los ocupantes «han lanzado escombros, pintura y almohadillas de acero contra los agentes». De hecho, los policías que salían de los edificios iban rociados de pintura y líquidos, según se ha podido observar desde la zona habilitada para la prensa.
La policía ha identificado 7 personas, tres en el edificio de la Ruina y cuatro más al Kubo. Los Bomberos de Barcelona han ayudado en el desalojo de los tres ocupantes de la Ruina, que han bajado acompañados de un Mosso por unas escalas de los apagafuegos. Pocos minutos más tarde de las 10 horas, la policía a conseguido sacar un último ocupante que se ha colgado del edificio del Kubo.
Expectación mediática
El espacio tomó bastante protagonismo con las elecciones, sobre todo por la aparición de partidos de derecha y extrema derecha que ‘atizaron’ el fuego. Un hecho que indignó un vecindario bastante escéptico con unas acciones que aumentaron la tensión en la zona durante toda la campaña electoral. En los últimos meses, la situación ha estado más bien tranquila. Pero con la orden de desahucio, los pisos ocupados del Kubo y la Ruina han vuelto a ganar protagonismo. La regidora del distrito de Sarriá-Sant Gervasi, Maria Eugènia Gay, ha pedido calma a los vecinos de la zona y ha mostrado confianza llena en el dispositivo que ha montado los Mossos d’Esquadra.