Delacrem se ha convertido en una de las heladerías de moda de Barcelona. Dependiendo de la hora a la que se vaya a degustar algunos de sus helados, el cliente no podrá evitar tener que hacer cola. Con dos establecimientos hasta ahora en la ciudad, uno en el paseo de Sant Joan, 59, y otro en la calle de Enric Granados, 15, la marca ha abierto recientemente un tercer comercio en l’Eixample, en la calle de Muntaner, 59, con productos catalanes de proximidad.
«No podemos estar más ilusionados viendo cómo llegan las primeras frutas, se hornean los primeros brownies y la avellana de Reus se convierte en el primer helado que sale de la máquina», escribió el establecimiento la semana pasada en Instagram. Finalmente, el nuevo local levantó la persiana el pasado 3 de abril, unos meses más tarde de lo previsto inicialmente.
El heladero que enamora a Dua Lipa
Detrás de Delacrem, está el maestro heladero Massimo Pignata, originario del Piamonte, que elabora helados que han enamorado a famosos como la cantante Dua Lipa y el actor Callum Turner.
Una veintena de sabores
El nuevo local de Delacrem ha sido bautizado como Terra y arranca con una carta, con una veintena de sabores, que se irá ampliando a lo largo de los próximos meses hasta llegar a unos 80. Además del helado con avellanas de Reus, se podrán probar de fresas del Maresme, yogures de la Fageda con grataculs (el fruto de la rosa silvestre), manzana al horno al gusto de canela, pastel de queso de Mahón con crumble o requesón con azafrán.
El obrador de Delacrem, situado en el paseo de Sant Joan, recibió el otoño pasado el premio al mejor comercio de proximidad que entrega la Fundació Barcelona Comerç. El jurado lo galardonó por «la calidad de su producto, elaborado con materias primas de proximidad y un respeto absoluto por la tradición artesana», así como «la excelencia del servicio, con una atención cercana y amable, poniendo a los clientes en el centro de la experiencia«.
‘Boom’ de heladerías
Tal como explicó hace un año el TOT Barcelona, la capital catalana vive un boom de heladerías, principalmente en el Eixample. Del 2021 hasta abril de 2024, la petición de licencias se multiplicó por cuatro, pasando de 10 a 42 en poco más de tres años. En el resto de la ciudad, la demanda siguió la misma línea, y las heladerías crecieron de 30 a 127.
