Los comerciantes del mercado de la Boqueria han vuelto a rechazar abrir los domingos y festivos, entre los meses de mayo y septiembre, que es cuando la legislación lo permite en las zonas turísticas. La votación tuvo lugar este miércoles y, como ha sucedido desde 2022, los titulares de los puestos se posicionaron en contra con un 70,1% de los votos, han confirmado al TOT Barcelona fuentes del mercado.
A diferencia de 2022, cuando el 80% de los comerciantes se mostró contrario a la propuesta, ahora este porcentaje se ha reducido en 10 puntos. En total, se recogieron 481 votos, de los cuales 340 rechazaron la iniciativa, mientras que 140 (el 29,1%) se inclinaron a favor. No obstante, el gerente de la Boqueria Òscar Ubide ha dicho en declaraciones al TOT Barcelona que entre 2023 y 2024 el resultado de las votaciones ha sido muy similar y no se han producido cambios significativos.
La primera votación, en 2022
Hace tres años, la votación se planteó después de que el Ayuntamiento de Barcelona, con el aval de la Generalitat, aprobara que los comercios de las zonas turísticas pudieran abrir los domingos y festivos entre el 15 de mayo y el 15 de septiembre. Pero, en aquella ocasión, los vendedores de la Boqueria votaron aún más mayoritariamente que ahora en contra de esta posibilidad. Ubide concreta que desde entonces, la pregunta se formula cada año a los vendedores y lo que plantea es si quieren abrir los festivos que permite la normativa. Fuentes municipales concretan que la votación se organizó después de que un grupo de comerciantes planteara abrir en domingos y festivos, de 12.00 a 20.00 horas.
La Boqueria, un «parque temático»
La Boqueria es un mercado que acaba de cumplir 185 años. Recientemente, en una entrevista con el TOT, el vendedor Pere Ferré, de Cal Neguit, un comercio que está a punto de cumplir un siglo y medio en la emblemática instalación, denunció que la Boqueria ha perdido su esencia. «A la Boqueria le ha pasado como al centro de Barcelona. Lo hemos deteriorado tanto que ahora mismo es un parque temático». Y añadió, en referencia al Ayuntamiento, que se había llegado a esta situación porque se había permitido.
El mercado se prepara para afrontar una reforma integral que debe comenzar este año y se prolongará, al menos, hasta 2027. Con unos 23,2 millones de visitantes anuales, la remodelación plantea un triple reto: mantener la función de mercado municipal, preservar su singularidad y disponer de una oferta comercial que garantice su viabilidad. Entre otras actuaciones, está previsto que la instalación se abra hacia la plaza de la Gardunya y renovar la parte central donde están los puestos de pescado.
Un presupuesto mínimo de 12 millones de euros
Según lo que explicó el Ayuntamiento el pasado octubre, el presupuesto será como mínimo de 12 millones de euros, pero no se plantea que mientras duren las reformas la Boqueria cierre totalmente ni que los comerciantes tengan que trasladarse a una carpa provisional. Tal como dijo la concejala de Comercio y Mercados Raquel Gil, se intentará que las afectaciones sean mínimas y si se realiza algún cierre se buscará que sea puntual.
