Barcelona se ha levantado este jueves con un avistamiento bastante insólito al horizonte mirando al norte. Desde varios puntos a las alturas de la capital catalana se ha podido ver esta mañana con la salida del sol una parte del Pirineo Oriental con varias cumbres nevadas levantándose imponentes sobre el resto de montañas y macizos.
Esta magnífica postal ha podido ser capturada desde el Observatorio Fabra por parte del meteorólogo de las emblemáticas instalaciones centenarias barcelonesas, Alfons Puertas, que ha compartido una fotografía donde se puede ver precisamente este tramo de los Pirineos todo prácticamente nevado encajado entre el cielo anaranjado y unas montañas de un marcado color verdoso. Puertas ha apuntado que esta panorámica ha sido posible gracias al ambiente «sereno y la baja humedad» que han predominado este jueves por la mañana.
De hecho, las condiciones han sido tan buenas que incluso se ha podido ver perfectamente el Pic de Bastiments, la cumbre más oriental de los Pirineos, ubicada en el Parc Natural de les Capçaleres del Ter i del Freser y con una altura total de 2.881 metros.
Varios avistamientos excepcionales de Mallorca
Hay que recordar que este noviembre ya se produjeron otros avistamientos excepcionales desde el Observatorio Fabra. Tanto el pasado 13 como el 14 de noviembre se pudo ver especialmente nítidamente la isla de Mallorca desde varios puntos a las alturas de la capital catalana, completando de este modo la tradicional postal anaranjada de la salida del sol en la ciudad.
El mágico momento también fue capturado por Puertas, que compartió varias fotografías donde se puede ver el litoral de la capital catalana flanqueado al fondo claramente por Mallorca. Puertas destacó entonces que estos avistamientos eran especialmente excepcionales sobre todo por la “cantidad de orografía visible más allá de las cumbres habituales”, puesto que a la imagen se distinguen el perfil de más de una docena de cumbres con sus correspondientes valles.

