La esperada lluvia ha llegado a Barcelona. Después de una semana donde se han batido varios récords de temperaturas y con las autoridades activando alertas tanto diurnas como nocturnas por calor intenso, la aparición estelar este sábado por la tarde de un potente aguacero ha permitido estabilizar la situación, haciendo bajar los termómetros y aligerando el grave contexto de sequía que vive tanto la ciudad como el resto del territorio catalán.

Entre 15 y 25 litros por metro cuadrado

Después de una pequeña tregua de madrugada, los chubascos han vuelto a apropiarse del cielo barcelonés este domingo dejando en pocos minutos cantidades de agua de entre 15 y 25 litros por metro cuadrado.

De hecho, según informa Betevé, las lluvias que se han producido en las últimas horas han permitido al Observatorio Fabra lograr el umbral de 200 litros por metro cuadrado acumulados desde el inicio del 2023, una cifra que normalmente se supera a principios del mes de mayo y que este año se ha alargado hasta finales de agosto, de forma que llega casi cuatro meses más tarde de lo previsto.

Muchos vecinos de la ciudad han aprovechado la esperada llegada de la lluvia para compartir a través de publicaciones en las redes sociales vídeos e imágenes del agua anegando las calles de la capital catalana en una postal que hacía tiempo que no se veía en Barcelona.

El importante aguacero se ha hecho notar en todos los barrios de la ciudad, desde el Putxet el Farró hasta el Carmel, pasando por Sant Antoni, el Raval, Montbau, el Eixample o la Vila de Gracia.

Todo ello en una semana donde el Ayuntamiento de Barcelona se ha visto obligado a activar la fase de emergencia por noches tórridas ante las altas temperaturas nocturnas que se estaban alcanzando de manera continuada y también la alerta por calor intenso diurno por la posibilidad de que los termómetros se situaran por encima de los 33 grados en algunos momentos del día.

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