Nuevo calendario para el traslado del mercado del Estrella a los jardines del Baix Guinardó. Ahora, las previsiones con las que trabaja el Instituto Municipal de Mercados son que las obras para hacer la carpa provisional se inicien durante la primavera del próximo año. El pasado septiembre, TOT Barcelona ya avanzó que las obras se retrasarían hasta 2025 y ahora el Ayuntamiento avala esa información. Fuentes municipales han explicado a este medio que estiman que los comerciantes estarán instalados en el mercado provisional antes de finales de 2025, cuando hace dos años estaba previsto que fuera a mediados de 2023. El traslado obedece al hecho de que el edificio del mercado de la calle Pi i Margall deberá ser demolido por graves problemas estructurales.
Un proyecto controvertido que podría acabar en los tribunales
El traslado del mercado del Estrella a los jardines del Baix Guinardó ha levantado mucha controversia. La asociación Salvem el Parc, integrada por vecinos y comerciantes, se opone porque considera que unos jardines no son el lugar para instalar la carpa de un mercado y continúa con la idea de llevar el caso a los tribunales, «para detener esta barbaridad, en pleno siglo XXI, de destrozar sin sentido zonas verdes tan importantes en una ciudad y de un uso intensivo por miles de ciudadanos», dice la presidenta de la entidad Patricia Moya. Tal como ya ha informado en diferentes ocasiones este medio, la denuncia podría hacerse efectiva cuando se hayan licitado las obras. El mandato pasado, el proyecto también levantó mucha polvareda política y, a finales de 2022, la alcaldesa Ada Colau llegó a detener el proyecto unos meses por la fuerte oposición vecinal. Hace un año, el plenario de Horta-Guinardó aprobó a instancias de Junts per Catalunya-Trias per Barcelona buscar una ubicación alternativa, pero como las proposiciones de la oposición no son vinculantes, el gobierno de Jaume Collboni hizo caso omiso del acuerdo.

132 alegaciones al proyecto
Según el Ayuntamiento, se han presentado 132 alegaciones al proyecto, de las cuales ya se ha terminado de hacer la valoración técnica y jurídica. «Actualmente, nos encontramos dentro del período máximo establecido por los protocolos municipales para dar respuesta y esto se hará durante los próximos días. De acuerdo con estas respuestas, se procederá a los siguientes pasos de la tramitación», dicen las fuentes municipales consultadas. Salvem el Parc tiene constancia de que se habían presentado «muchísimas alegaciones», pero en el momento de la publicación de este artículo «no hay ninguna resuelta», subraya Moya.
Los comerciantes estarán unos tres años en los jardines
Ahora, la previsión del Instituto Municipal de Mercados es iniciar la licitación del contrato de ejecución de las obras tan pronto se resuelva la aprobación definitiva del proyecto, que es lo que concretará el plazo de ejecución de las obras, que el Ayuntamiento prevé que comiencen en primavera. Una vez levantada la carpa, los comerciantes podrían estar en los jardines del Baix Guinardó unos tres años aproximadamente, hasta que se construya el nuevo equipamiento en Pi i Margall.

Una inversión de 7,1 millones
La construcción de la carpa del mercado se elevará hasta los 7,1 millones de euros. Inicialmente, en 2022, el proyecto se valoró en 3,2 (a partir del proyecto básico), es decir, que el coste se ha más que duplicado. Hace unos meses, este medio ya había informado que había subido hasta los 5,8 millones. Moya califica todo el proceso de «turbio» y considera una «obsesión económica» hacer unas «obras faraónicas» con todo el barrio en contra, a su parecer. Además, desde Salvem el Parc opinan que la clientela del mercado de Pi i Margall no irá a comprar a los jardines del Baix Guinardó por la lejanía de la carpa provisional. Moya recuerda al Ayuntamiento «no han buscado ninguna otra ubicación o solución para hacer otro proyecto o reubicar los puestos en otros mercados con puestos cerrados».

La carpa derribará el lago de los jardines
La carpa en los jardines del Baix Guinardó supondrá tener que derribar el lago que hay allí. Una vez eliminada la lámina de agua, la zona se cubrirá “con tierras compactadas sobre las cuales poder realizar la cimentación”, detalla el proyecto ejecutivo consultado por TOT. El documento prevé que la carpa, con una superficie de 1.850 m², tenga cuatro accesos con rampas, mientras que la zona logística se instalará donde ahora hay unos juegos infantiles. Las obras obligarán a talar solo entre seis o siete árboles, aunque inicialmente eran unos 25. La construcción del mercado provisional afectará también la calle de la Marina, ya que en esta vía se habilitará la zona de carga y descarga, lo que hará que desaparezcan 10 plazas de aparcamiento de coches y una docena de motos.
Se hará un nuevo mercado con vivienda encima
Mientras los comerciantes del mercado del Estrella estén en los jardines del Baix Guinardó se construirá el nuevo equipamiento en la calle de Pi i Margall, una arteria que se ha pacificado. El edificio tendrá dos plantas subterráneas, una planta baja -en la cual estarán los puestos del mercado- y tres pisos superiores. Según el Plan de Actuación Municipal (PAM), en la parte superior está previsto construir vivienda dotacional. Inicialmente, ni el edificio del mercado debía ir a tierra para reparar los problemas estructurales -con importantes filtraciones de agua y amianto en la cubierta- ni levantar pisos públicos encima. Fuentes del Ayuntamiento hablaban a finales de 2021 de la necesidad de hacer una reforma exprés del mercado. Tres años más tarde ni siquiera ha comenzado.