Desde hace pocas semanas, Barcelona cuenta con una heladería única. Se trata de Azah, el primer establecimiento de helados de origen libanés. El local está situado en una de las calles de moda del Eixample, Enric Granados, 61. El copropietario del negocio es Hugo Cantona, sobrino de la leyenda del fútbol, Éric Cantona, reconvertido en actor.
El futbolista francés jugó con el Auxerre, el Olympique de Marsella, el Leeds y el Manchester United. También fue internacional con la selección de su país. Entre otros títulos, ganó dos ligas francesas y cuatro Premier. Su carrera deportiva también estuvo marcada por actos de indisciplina, ya que en 1988 insultó al seleccionador francés, Henri Michel, y en 1995 agredió a un hooligan que lo había insultado.
Con obrador propio
Azah (que en catalán significa azahar, uno de los sabores más populares del Líbano) levantó la persiana a mediados de mayo. Es la primera heladería libanesa de todo el Estado español. Con obrador propio, en este local del Eixample destacan los helados hechos con plantas aromáticas. Según explicó Cantona a El Nacional, uno de los ingredientes característicos de los helados libaneses es la flor de naranjo. También es típico poner en la bola de helado pistachos picados y un poco de nata. Y utilizar mástique, una pasta de resina aromática que se mastica. Entre los helados que se pueden degustar están el de tomillo y el de agua de rosa con lavanda.
En Barcelona, las heladerías de calidad están de moda. Delacrem, con Massimo Pignata al frente, dispone de tres establecimientos en el Eixample. La firma argentina Lucciano’s tiene dos tiendas en Barcelona, una en la rambla de Catalunya y otra en la calle de Ferran (en la antigua pastelería Massana, reconvertida en una nave espacial). Lucciano’s destaca por la ambientación única de sus locales. Y Albert Adrià, hermano del chef Ferran Adrià, abrió ya hace un año una heladería en la Rambla, asociado con Torrons Vicens y el pastelero Alfredo Machado.
