El último barómetro ha dejado muchas y diferentes lecturas. Hay quién se coge al suspenso de Jaume Collboni para apretar al ejecutivo socialista, otros recuerdan que el turismo y la crisis residencial se acercan a la inseguridad como principal problema de los barceloneses o quienes prefiere fijarse en la buena acogida que parece tener la Copa América en una mayoría de ciudadanos –seis de cada diez–. Pero si entramos entre bambalinas, casi a la sala donde se cocina el barómetro, encontramos datos cuando menos curiosos; la gente que se siente más catalana que española supera los que se sienten más españoles que catalanes, si bien ganan los que dicen sentirse igual de catalanes que españoles. Y la mitad dice tener el catalán como primera lengua, cifra que choca con algunos estudios recientes. La otra cifra remarcable, que centra las siguientes líneas, es el volumen de personas que se declaran «apolíticos».

Siempre según el barómetro, en Barcelona el 66% –casi siete de cada diez– se siente de izquierdas o centroizquierda, un 13% de derecha o centroderecha y un 8% se sitúa en medio. Todavía queda un pequeño margen de gente, margen que representa aquellos que están bien lejos de la política. La cifra de personas apolíticas, que sienten apatía por la política, llega a un 1,8%, un 2% de las mujeres y un 2,5%. Es un dato muy simbólico; teniendo en cuenta que la encuesta pregunta a 807 personas, estamos hablando que cerca de una veintena mínimo ha declarado ser «apolítica». La cifra todavía es más grande si incorporamos los que no la entienden, categoría que agrupa un 3,4% de los barceloneses, el 4,1% de las mujeres y el 2,5% de los hombres.

El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona, encabezado por Jaume Collboni / Ayuntamiento

Sant Martí y Gràcia, los más distritos apolíticos

Por zonas, la mayoría de distritos siguen la tónica general, aunque hay un par que se desmarcan levemente. En una estadística dominada por el 0% y algún 1% aislado –la encuesta prácticamente no ha encontrado apolíticos en Ciutat Vella, Horta-Guinardó, el Eixample (de 132 personas encuestadas, ninguno dice serlo), Sant Andreu o Sants-MontjuicSant Martí sorprende con un 6% de personas que se declara apolítica, cifra que duplica la de Gracia, el segundo distrito con más apolíticos.

En Gràcia, un 3,4% han dice sentirse apolítico. En este caso, y a diferencia de Sant Martí, que es el segundo distrito con más gente que «no entiende» la política (3,9%), el distrito graciense aparece como el segundo con más personas al corriente de los asuntos políticos (solo un 2,8% dice no entenderla). Otra cifra relevante la encontramos a Les Cortes, donde el 2,9% no sienten ningún vínculo con la política. La cifra en Sarrià-Sant Gervasi es de un 1,9% y en Nou Barris del 1,3%.

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