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Denuncian que el propietario de la heladería Dellaostia de Gràcia impedía a los trabajadores hablar en catalán

Hace poco más de una semana, la denuncia de un consejero de ERC de Gràcia, Guillem Roma, sobre la catalanofobia de la heladería Dellaostia de Gràcia se viralizó y puso el foco en un establecimiento, propiedad del empresario argentino Leandro Rincón. Tal como denunció Roma, a su pareja la increparon por hablar en catalán, “con ganas de provocar, diciéndole que era una maleducada por hablar en catalán porque estábamos en el Reino de España”. Pero el caso de la pareja de Roma no es único. En Google, numerosas reseñas ponen de manifiesto que el catalán no gusta al propietario de la calle del Torrent de l’Olla. Y ahora en la red X se ha vuelto a viralizar un tuit de Sebastià Roig, del 10 de julio, en el cual aseguraba que se impedía que los trabajadores catalanoparlantes de la heladería hablaran entre ellos en catalán.

«Que no os engañen los carteles. El propietario prohíbe a los trabajadores catalanoparlantes que hablen en catalán entre ellos. Es argentino y lo encuentra una falta de respeto. Cuando nos despertamos, el franquismo de la hostia todavía estaba allí. Y nos quedamos helados», escribió @ensebastiaroig.

«Se fue cansada del trato lingüístico que le dispensaba el dueño»

El TOT Barcelona se ha puesto en contacto con el autor del tuit y ha explicado que él no trabajó allí, pero conoce bien a la persona que lo hizo. «Se fue cansada del trato lingüístico que le dispensaba el dueño». Este medio ha pedido a Roig poder hablar con el empleado, pero no lo ha garantizado porque no le gusta el protagonismo.

En el momento de la publicación de este artículo, el tuit sumaba cerca de 1.900 retuits, más de 2.500 me gusta, 121 citas y 186 comentarios.

Después de la denuncia pública hecha por el consejero de ERC, en la heladería Dellaostia se pintó «Fascistas de mierda» y se pegaron adhesivos a favor de respetar el uso del catalán.

El propietario niega la catalanofobia

En una entrevista al diario argentino La Nación, recogida por el TOT, Rincón negaba la catalanofobia. Dijo que abrió el negocio hace unos tres años y que nunca ha habido ningún problema con el catalán. También dio una versión diferente a la de Roma sobre el enfrentamiento con la pareja del cargo de ERC. Rincón asegura que la mujer lo insultó y lo trató de «imbécil».

El 26 de agosto, el consejero de ERC publicó un nuevo tuit, en el cual mencionaba al TOT Barcelona, donde calificó lo que vivieron en la heladería de «flagrante caso de discriminación lingüística». Y reiteró que en ningún caso su pareja se quejó de que le hablaran en castellano, sino que fue «increpada por hablar en catalán». Roma ha cargado contra la manipulación y tergiversación de «la caverna mediática españolista de derecha y ultraderecha» de los hechos. Y ha valorado positivamente que ha percibido «un cambio de actitud» en la ciudadanía, «harta» de que vulneren sus derechos lingüísticos.

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