Otro comercio emblemático que baja la persiana en Barcelona. Se trata de la camisería y tienda de confección Windsor, un clásico de la rambla de Catalunya. El establecimiento cerrará hacia la segunda quincena de mayo y el motivo es la jubilación de la propietaria del negocio, Carmen Lucas, que tiene 83 años, dice su hija Cristina Peus, en conversación con el TOT Barcelona.
El Windsor está en la rambla de Cataluña, 42, esquina con Consell de Cent, desde hace unos 55 años. La tienda la levantaron el padre y la madre de Cristina. «Primero estuvieron en la calle de Sant Antoni Abad, después en Provença y, finalmente, en la rambla de Catalunya, donde el comercio lleva más de medio siglo».
Liquidación por jubilación
Un gran cartel en la fachada en el que se puede leer

Entrar en el Windsor es entrar en un tipo de establecimientos que están desapareciendo en Barcelona, venta de ropa al por menor, clásica, pero de buena calidad. En el Windsor, la atención al cliente es una de las señas de identidad del establecimiento. De hecho, la tienda no tiene ni página web y continúa despachando, como lo ha hecho los últimos 50 años, desde detrás del mostrador, en este conocido paseo barcelonés. Otra camisería que cerró, a finales de 2019, fue la Xancó de la Rambla, con 200 años de historia de la ciudad.
Uno de los fundadores de la plataforma Emblemàtics Barcelona, Alberto Mejías, lamenta el cierre del Windsor. «Conozco a Carmen Lucas desde hace unos 50 años. Es muy amable y tiene ropa de mucha calidad, en el pasado también para hombre. Durante algunos años tuvo de las mejores pieles de la ciudad. Después, cambió, y desde hace dos años solo vende ropa de mujer», destaca.
Otros cierres en rambla de Cataluña
El cierre del Windsor se suma a otros cierres de comercios con décadas en rambla de Cataluña. En octubre de 2022, bajó la persiana el horno Bopan, después de no poder llegar a un acuerdo con la propiedad del local. En julio del 2023, lo hizo Benitosports, que hacía 35 años que estaba en este paseo. Y en otoño de 2023, se clausuró la tapicería Gancedo, abierta el 1945 y que forma parte del catálogo patrimonial de la ciudad.





