La capital catalana ha tenido un reconocimiento especial para uno de sus establecimientos emblemáticos probablemente más desconocidos para el gran público. La cuarta edición de los Premis Barcelona Restauració ha otorgado una mención honorífica a El Cafè del Centre, un negocio con 150 años de historia ubicado en el número 69 de la calle de Girona, en el barrio de la Dreta de l’Eixample.
En concreto, el jurado de estos galardones ha valorado la larga trayectoria del establecimiento, la voluntad de mantener las tradiciones y su implicación en el barrio para otorgarle el reconocimiento. «Por sus 150 años de historia como establecimiento emblemático de la ciudad vinculado al barrio, con gran sensibilidad para preservar la historia y la tradición en la ciudad», señalan los organizadores en un comunicado.
El Cafè del Centre se inauguró el año 1873 como casino y actualmente funciona como restaurante. El Ayuntamiento lo ha reconocido como uno de los establecimientos emblemáticos de la ciudad y es considerado como una de las cafeterías modernistas en activo más antiguas de la capital catalana.
Referentes más allá de casa nuestra
El acto de entrega de estos premios tuvo lugar este lunes al atardecer a la antigua fábrica Damm y contó con la presencia del cuarto teniente de alcaldía, Jordi Valls, y la regidora de Promoción Económica, Raquel Gil, además de numerosos representantes del sector de la restauración. En su intervención, Valls felicitó a los galardonados y les emplazó a “seguir apostando por hacer de Barcelona una ciudad de referencia internacional en el ámbito de la gastronomía y la restauración, con un énfasis especial en retos como la sostenibilidad, la lucha contra el derroche alimentario, la profesionalización y formación continua, la mejora de las condiciones laborales y la transformación digital de los establecimientos”.
Hay que recordar que los Premis Barcelona Restauració han llegado este año a su cuarta edición después de dos primeras marcadas por la pandemia del coronavirus y la del año pasado, que rindió un homenaje al sector de la restauración una vez ya recuperada la cotidianidad.
