El Taller Masriera se prepara para superar uno de los últimos obstáculos antes de convertirse en un nuevo equipamiento cultural abierto a la ciudadanía y en sede de la biblioteca Sofia Barat. El Ayuntamiento de Barcelona -propietario desde 2020 de este inmueble, una de las joyas más olvidadas de la ciudad- ha informado que el próximo 24 de marzo comenzará la retirada de las cerca de 3,3 toneladas de amianto distribuidas por unos 730 metros cuadrados, que se detectaron en un estudio hecho público el pasado mes de agosto.
El consistorio ya cuenta con el correspondiente permiso del Departamento de Trabajo para llevar a cabo esta actuación, que está previsto que se alargue durante cerca de un mes y medio y que tenga un coste de unos 70.000 euros. Inicialmente, la administración pretendía comenzar los trabajos a finales de 2024, de modo que la intervención acabará acumulando un retraso de casi cuatro meses. Mientras estén en marcha los trabajos, nadie podrá acceder a este edificio de estilo neoclásico obra del arquitecto Josep Vilaseca i Casanovas y catalogado como Bien Cultural de Interés Local (BCIL).
Dentro de este singular recinto, construido en 1882 y que originalmente funcionó como taller de pintores y escultores, hay varios puntos donde se concentra esta sustancia potencialmente cancerígena, desde algunas de las cubiertas del patio interior a varios tubos pasando por las chimeneas o incluso por algunos de los componentes del escenario teatral. En total, se retirarán 91 metros lineales de bajantes, tuberías y chimeneas; 156 metros cuadrados de cubiertas de fibrocemento; dos depósitos de agua; y el aislamiento al fuego posterior al telón del teatro, de 36 metros cuadrados.
Capa superficial para evitar dispersión de fibras
La primera actuación que se llevará a cabo tiene por objetivo minimizar al máximo la dispersión de fibras de amianto y consistirá en la imprimación superficial de las placas de fibrocemento con una disolución acuosa de copolímero de acetato de polivinilo. Antes de comenzar los trabajos de desamiantado, se comunicará a la propiedad y a los vecinos el tipo de trabajo a realizar, el horario de trabajo (de ocho de la mañana a tres de la tarde), la duración y las recomendaciones oportunas como cerrar las ventanas y las puertas, proteger con plástico las salidas de aire acondicionado.
De Lorca a Folch i Torres
Cabe recordar que el Taller Masriera fue adquirido en 2020 por un precio de 7,5 millones de euros por parte del Ayuntamiento como respuesta a una histórica demanda vecinal con el doble objetivo de preservar este emblemático edificio, situado en los números 70 y 72 de la calle de Bailèn, y poder cubrir el déficit de equipamientos en el barrio. Estas instalaciones albergaron un teatro histórico con una trayectoria brillante en la historia escénica catalana. Las salas de este equipamiento acogieron la compañía de Lorca, vanguardias futuristas, concursos pioneros, artistas internacionales e intelectuales como Apel·les Mestres, Josep Maria Folch i Torres, Eduard Tolrà y Manuel Blancafort, entre otros.




