Barcelona volverá a ser un punto importante del rally más duro del mundo, el Dakar, diecinueve ediciones después. La mítica carrera tiene una estrecha relación con la ciudad que se remonta al 1989 cuando fue el final de la primera etapa de la carrera y llegó a su punto álgido en 2005, cuando fue el escenario del inicio de la competición. Casi dos décadas después la carrera ha cambiado mucho y ya no se celebra en África, sino en Arabia Saudí, cosa que dificulta que Barcelona pueda tener un papel relevante. Ahora bien, la dirección de la carrera ha escogido al Puerto de Barcelona como base logística para el traslado de todos los vehículos de los competidores hasta el Arabia Saudí, que se ejecutará entre el 2 y el 7 de diciembre.
Esto ha provocado que la ciudad sea escenario para la presentación de los equipos estatales que competirán en la 46.ª edición del Rally, que tendrá lugar del 5 al 19 de enero de 2024. El acto, que se celebrará el próximo viernes en la plaza Rosa de los Vientos del Puerto Viejo, estará abierto al público y servirá para despedir a los participantes de esta mítica prueba antes no embarquen junto con el resto de equipos rumbo a la carrera.
De hecho, el Ayuntamiento ha informado que toda la comitiva de la competición, de hecho, estará del 30 de noviembre al 2 de diciembre instalada al parque del Foro, donde se realizarán las verificaciones técnicas y administrativas de los más 800 vehículos participados. A pesar de que el acceso en esta zona estará cerrado durante la primera jornada, los días 1 y 2 de diciembre quien lo desee podrá acceder en el espacio y ver de primera mano todas las tareas de la organización y las comprobaciones de los equipos que participarán en el Dakar. Esta iniciativa ha sido bautizada “Barcelona vive el Dakar”.
Estos días serán una oportunidad única por conocer de primera mano los vehículos que competirán en el Dakar antes de su embarque, una operativa que se hará al Puerto de Barcelona y que implicará transportar todos los vehículos en dos barcos, rumbo en Arabia Saudí. La elección de la capital catalana para la logística de traslado hasta Arabia Saudí es una de las grandes novedades de la edición de este año, porque habitualmente era al Puerto de Marsella, donde se centralizaba esta operación.
Disfrutar de un “gran acontecimiento deportivo mundial”
Desde el Ayuntamiento, el regidor de Deportes, David Escudé, ha destacado que con esta iniciativa buscan “que la ciudadana tenga la posibilidad de ver los vehículos del rally desde primera línea” y pueda ser partícipe “de este gran acontecimiento deportivo mundial”. En esta línea, el regidor socialista ha deseado que estos días de Dakar sean una fiesta donde todo el mundo quien quiera se acerque al parque del Foro y al Puerto Viejo y vaya como se “preparan los pilotos por este gran reto, como es el Dakar”.
Por otro lado, el presidente del Puerto de Barcelona, Lluís Salvadó, ha destacado el papel de la institución que dirige en el rally, su comunidad portuaria, y su infraestructura, en combinación con el atractivo de la ciudad de Barcelona, para atraer pruebas deportivas con repercusión internacional. “Las instalaciones y operadores del Puerto de Barcelona han demostrado ser la mejor opción para los organizadores del Dakar en la hora de trasladar todos los competidores hasta Arabia Saudí, igual que los espacios del Puerto Viejo convencieron a los organizadores de la Copa América para celebrarla en Barcelona el próximo año”.
Desde la dirección de la carrera, David Castera, ha destacado el compromiso y los excelentes resultados de los pilotos españoles en la prueba, señalando que “volverán a constituir la segunda nacionalidad más numerosa en cuanto a los países de donde provienen los competidores en este Dakar 2024: un total de 119 pilotos y copilotos, probablemente presentes en todos los niveles de la clasificación dentro de unas semanas, con grandes campeones y forofos apasionados por el desierto”. “La posibilidad de organizar la carga de los vehículos al puerto de Barcelona es una forma de tener un gesto con la ciudad que nos acogió el 2005 para la salida de una edición que se dirigía al Senegal. El pasado dialoga a menudo con el presente y el futuro”, ha añadido Castera.