El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado este mes de marzo la reactivación del proyecto de transformación del barrio de Vallcarca, una iniciativa que prevé toda una serie de cambios urbanísticos en torno a un nuevo gran parque verde. La primera de estas piezas que se ha comenzado a mover ha sido la construcción de dos canchas de baloncesto callejeras en la avenida de Vallcarca, en la intersección entre las calles de Esteve Terrades y el viaducto de Vallcarca.
Con la aprobación inicial en la Comisión de Gobierno de este planeamiento, se pretende desbloquear la remodelación de esta zona de la ciudad, que después de décadas de provisionalidad renacerá con la construcción de vivienda asequible, la mejora del espacio público y la generación de verde urbano. Según la información facilitada por el consistorio, la nueva zona deportiva al aire libre tendrá una superficie total de 2.000 metros cuadrados y tendrá por objetivo sustituir la ya existente en la misma avenida de Vallcarca. Este espacio hoy ya está parcialmente ocupado por las obras de construcción de un nuevo edificio de vivienda protegida en suelo municipal, ya que se trata de un terreno edificable.
Las obras tienen un presupuesto total de cerca de 1,94 millones de euros y la previsión es que puedan iniciarse este verano, de manera que deberían concluir a comienzos del 2026. Las dos canchas tendrán quince metros de ancho cada una y una profundidad aproximada de once metros y también se prevé habilitar una zona de gradería.
Promociones de viviendas sociales y obras de servicios
Más allá de las canchas de baloncesto, Vallcarca tiene actualmente en marcha dos nuevas promociones de vivienda de protección oficial (HPO) del parque público en suelo municipal que suman un total de 60 pisos que se destinarán al alquiler asequible y al cohousing en cesión de uso. A estas operaciones se suma la generación de nuevo suelo para construir más vivienda, mediante la compra de una finca situada en la calle de la Mare de Déu del Coll, y la aceleración del proyecto del nuevo parque central, arrancando con las obras de la llamada anilla de servicios, es decir, la urbanización y la construcción y canalización de servicios subterráneos en toda la anilla que forman las calles de Mare de Déu del Coll, Farigola, Calendau, Argentera, Cambrils y Medes.