El Ayuntamiento de Barcelona hará un homenaje el 23 de febrero a Milagros Carballo, la vendedora de golosinas que murió el 16 de enero a los 90 años. Milagros era un icono del barrio de Sant Antoni, donde tuvo un quiosco durante más de seis décadas en la esquina de la ronda de Sant Antoni con Villarroel.
Fuentes municipales han confirmado que el acto de recuerdo lo organizará el distrito del Eixample, pero con la voluntad de que sea abierto a vecinos y entidades. Milagros era muy querida, tanto en Sant Antoni como en el fronterizo barrio del Raval. En una entrevista a la
Confirmada la asistencia del regidor Jordi Valls
El homenaje está previsto que se haga donde estaba el quiosco, que ya ha sido derrocado, a las 18.00 horas. De momento, el consistorio ha confirmado la asistencia del regidor del Eixample y teniente de alcaldía del área económica Jordi Valls. Algunos residentes han comentado la posibilidad que se instale una placa, pero el Ayuntamiento dice que tienen que transcurrir cinco años desde la muerte de una persona.

El domingo 28 de enero, dos semanas después de la muerte de Milagros, el quiosco que regentó durante más de 60 años apareció pintado de blanco, una forma de recordar a la comerciante, junto con los numerosos ramos de flores que espontáneamente vecinos y comerciantes dejaron ante la instalación. Hasta entonces, toda la estructura estaba llena de grafitos.
Derribado el 31 de enero
El mismo fin de semana del 27 y 28 de enero, cuando el quiosco fue pintado, el Ayuntamiento informó que lo derribaría, ya que no se conceden más licencias de este tipo. Dicho y hecho. Cuatro días después, el 31 de enero, la parada fue al suelo.