Agentes de los Mossos d’Esquadra de la comisaría de Gràcia han detenido a 11 personas por formar parte de un grupo organizado que se dedicaba a robar motos en Barcelona y el área metropolitana. Su objetivo principal eran motos de una conocida marca japonesa acabadas de matricular. Después las transportaban en furgonetas hasta naves industriales, donde otras personas las desmontaban y las preparaban por venderlas por piezas.
En aquel punto de la operación, las trasladaban a les Franqueses del Vallès y de Caldes de Montbui —Vallès Oriental—, donde las almacenaban para después enviarlas a Marruecos. Parte de las piezas se enviaban en viajes a Marruecos que se hacían con furgonetas, que iban llenas de objetos personales entre las cuales se escondían. La intención era que las autoridades de tráfico y fronterizas no registraran los vehículos. La otra parte de las piezas las trasladaba con camión una empresa de transporte con sede en el Marruecos. Se escondían entre otros paquetes totalmente lícitos. Una vez en Marruecos, las motos se volvían a montar y se venían a compradores particulares.
Los Mossos d’Esquadra detuvieron a ocho de los acusados los pasados 13 y 14 de septiembre y a los otros tres días más tarde. Posteriormente, los agentes devolvieron siete de las motocicletas robadas a propietarios que habían denunciado la sustracción en Barcelona, Mollet del Vallès —Vallès Oriental— y Sant Cugat del Vallès —Vallès Occidental—.
Aumento de la criminalidad
En cuanto a la situación de la criminalidad, según el último balance publicado por el Ministerio de Interior, Barcelona es el municipio del área metropolitana donde la criminalidad ha crecido más durante el primer semestre del 2023. Concretamente, ha aumentado un 15% en la ciudad, con un total de 80.755 delitos entre los meses de enero y junio. En el conjunto de la provincia de Barcelona, la criminalidad también ha crecido, pero bastante menos que en la capital catalana: un 8%.
