El escándalo por el caso de los polémicos carteles contra los hermanos Maragall va por el camino de acabar como el rosario de la aurora. Tolo Moya ha decidido levantar la voz para denunciar que ERC le está probando de echar el muerto y para anunciar que defenderá su inocencia por la «vía judicial». En un comunicado hecho público a través de las redes sociales, el exdirector de comunicación y hasta este miércoles asesor de la formación en la Diputació de Barcelona ha acusado al partido de situarlo como jefe de la trama desde el inicio «sin aportar ningún tipo de prueba» y ha asegurado que no permitirá que se le acuse de nada de lo que no es «responsable».
«Continúo sin aceptar que me quieran cargar esto a mí. No permitiré que se me acuse de nada de lo que no soy responsable y junto con mi abogado, continuaremos trabajando para que los hechos se esclarezcan, ahora por vía judicial», apunta Moya, que ha hecho público este comunicado después de que ERC le haya cesado hoy de sus funciones bajo la sospecha de la formación de haber filtrado unos audios en que miembros de la cúpula de comunicación de los republicanos discutían cómo minimizar el impacto del caso de los carteles.
Sobre los hechos de los últimos días. pic.twitter.com/mfyxsjy7e2
— Tolo Moya (@ToloMoya) July 17, 2024
Medida «desesperada» y «encubrimiento reiterado»
En el contundente comunicado, el exdirector de comunicación sí que acepta «de manera formal» el cese porque no se siente «identificado» con la manera de hacer de la dirección actual de ERC, a quien acusa de haber ido cambiando la versión de los hechos a medida que se han ido conociendo más detalles y de haber «mentido» sobre «el conocimiento y el encubrimiento del caso de manera reiterada«. Moya, sin embargo, sí que considera que su cese «demuestra una vez más ser una medida desesperada para silenciar a quien formalmente, y desde dentro, ha pedido que se continúen investigando los hechos para llegar a toda la verdad».
