El candidato del PP a la alcaldía de Barcelona por el 28M, Daniel Sirera, confía que las próximas elecciones sirvan por «recuperar el espacio político perdido» del Partido Popular en Cataluña que se ha diluido en los últimos años. En este sentido, pues, el candidato de los populares ha querido remarcar que su objetivo por los comicios del 28 de mayo es, «como mínimo», doblar la representación del 2019, en la cual la candidatura liderada por Josep Bou obtuvo el 5,01% de los votos.
Sirera se abre, también, a hacer pactos postelectorales para «echar» Colau del Ayuntamiento, pero ha avisado que no entregará ningún cheque en blanco, haciendo referencia al hecho que no pondrá la capital catalana al «servicio de Pedro Sánchez o Carles Puigdemont», en caso de pactar con el PSC o Junts: «Quien acepte mi programa, hablaremos; quién quiera que le regale mis votos, que hable con otro», ha advertido el candidato popular en una rueda de prensa organizada por la Agencia EFE. El candidato de los populares considera que pueden ser una figura decisiva en la conformación de gobierno.
Siguiendo la tónica de reproches cruzados que se ha vivido durante el primer fin de semana de campaña electoral, el alcaldable también ha cargado contra el candidato de Junts, Xavier Trias, a quienes ha acusado «de tener Carles Puigdemont amagadet al armario» hasta que acabe la campaña. Una acusación que va en contra de una de sus máximas que es «acabar definitivamente con el proceso» porque lo considera un mal negocio para los barceloneses.
Trias se niega a pactar con el PP
Mientras que Sirera deja la puerta abierta, pero con condiciones, a pactar con Trias, el candidato de Junts ha declarado esta mañana que “sea el resultado que sea” no necesita pactar con los populares “para ser alcalde”. A pesar de que valla esta puerta, Trias deja otras de abiertas para llegar a acuerdos postelectorales con otras fuerzas políticas, como por ejemplo los socialistas.
