Con los presupuestos de Barcelona, que se tienen que votar el viernes al plenario del Ayuntamiento, a punto de tumbarse por el voto negativo de los Comunes, las diferencias entre los dos partidos se ha hecho de nuevo evidente este jueves por la adjudicación de la construcción de la terminal G de cruceros del Puerto de Barcelona.
En esta ocasión, el rifirrafe ha tenido lugar en la red X, entre la extitular de Urbanismo Janet Sanz y la primera teniente de alcaldía actual, Laia Bonet. Sanz, de los Comunes ha escrito que eln2023, Barcelona llegó a un número inasumible de cruceristas: 3,5 millones. «Ante esto, el Puerto de Barcelona y el Ayuntamiento acuerdan adjudicar la séptima terminal de cruceros. Barcelona lo que necesita es limitar el número de cruceros y cruceristas».
«O miente o no recuerda lo que firmó»
Desde el PSC, Bonet ha sido muy contundente con Sanz: «O miente o ni recuerda lo que firmó. La nueva terminal será posible gracias al acuerdo que Barcelona en Comú firmó con el Puerto en 2018. Los Comunes no osaron limitar ni la dimensión de las nuevas terminales, ni el número de cruceros, ni el número de cruceristas», ha asegurado la número tres de los socialistas a las pasadas elecciones municipales.
La regidora del PSC ha continuado atacando a Sanz, afirmando que el PSC no votó a favor. «Por cierto, nosotros ayer no votamos a favor de la adjudicación de la séptima terminal. De hecho, hemos reclamado al Puerto que hay que actualizar un acuerdo que hoy es insostenible para la ciudad. Así que, menos lecciones y más honestidad».
La nueva terminal, el 2027
Con la aprobación de esta concesión el miércoles 20 de marzo, el Puerto y Catalonia Cruise Terminal G cerraron un acuerdo que prevé la inversión por parte de la compañía de cerca de 85 millones de euros para poder tener la nueva terminal operativa la primavera de 2027, una vez se cierre la terminal Sur del WTC, en 2026.
