La prioridad del gobierno socialista del Ayuntamiento de Barcelona está clara: Aprobar los presupuestos de la capital catalana. El cuarto teniente de alcaldía, Jordi Valls, ha destacado que lo que pretende el gobierno de Jaume Collboni es aprobar los presupuestos de la ciudad. Valls ha señalado en rueda de prensa que las conversaciones que ha llevado a cabo el partido de los socialistas con los comunes o esquerra republicana han estado en un «ámbito meramente presupuestario» y señala que «si algo determina la política en un ayuntamiento son los presupuestos, las políticas públicas se hacen a través de los recursos que nosotros queremos destinar en los presupuestos».
No cierra la puerta a otras conversaciones
Valls ha destacado las coincidencias «dentro del ámbito presupuestario» entre los diferentes partidos, y señala que «continuaremos haciendo reuniones con ellos, continuaremos hablando con ellos» pero, a la vez, ha querido recordar que era dentro del marco que él había enmendado en la comisión de economía, el de los presupuestos. El cuarto teniente de alcalde ha dicho que «tiene que haber más elementos» para determinar si hay un gobierno o no hay un gobierno. Valls ha señalado que ve «bastante difícil que ahora en 15 días formemos un gobierno».
Valls ha querido refrescar la memoria a los comunes y asegura que «no pido un cheque en blanco a nadie, les pido que voten un presupuesto, ha habido diferentes partidos políticos que sin entrar en el gobierno han apoyado unos presupuestos y, además, a los comunes se les ha hecho esto en anteriores mandatos». Un hecho que Valls ha elogiado, puesto que «ha habido apoyos presupuestarios sin entradas de gobierno y sin condicionantes de gobierno porque consideraban que era un presupuesto útil y positivo por la ciudad», un elogio a otras formaciones con una colleja incluida a los comunes antes de sentenciar la frase con un «no pido un cheque en blanco».
