Protesta de los vecinos de Vallcarca afectados por el derribo de dos edificios y un local ocupados, los tres de titularidad municipal, en el barrio del distrito de Gràcia. La movilización ha obligado a suspender el acto del anuncio de la pregonera de las fiestas de la Mercè del 2025, así como de la presentación del cartel de la fiesta mayor de Barcelona, que debía tener lugar en el Invernadero del parque de la Ciutadella.
Entre 15 y 20 personas han seguido la comitiva del alcalde, Jaume Collboni, hasta la entrada de la Ciutadella. Agentes de la Guardia Urbana se han situado en la puerta del Invernadero y han impedido el acceso de los manifestantes.
Traslado del acto al Saló de Cent
Todo apuntaba a que ante la presencia de medios, la Guardia Urbana no desalojaría a las personas concentradas y el alcalde ha decidido trasladar la presentación de la Mercè al Saló de Cent del Ayuntamiento, a las 11.00 horas. Solo se vivió un momento de tensión cuando un manifestante intentó entrar al Invernadero y un agente lo sacó.

«Jaume Collboni, ‘desalojador«
Los concentrados han gritado contra la especulación y contra el alcalde. «Ninguna vecina fuera del barrio. Vallcarca para vivir», han dicho los manifestantes frente a una quincena de policías de la Guardia Urbana. «Jaume Collboni, desalojador«, han añadido.

Finalmente, cuando el Ayuntamiento decidió cancelar el acto, los manifestantes entraron al Invernadero sin oposición de la Guardia Urbana y colocaron las pancartas que llevaban sobre el atril desde el cual Collboni iba a hablar, pero estas fueron retiradas rápidamente por un vigilante de seguridad. Los vecinos de Vallcarca informaron que tenían la intención de trasladar su protesta a la plaza de Sant Jaume.
No es la primera vez que los vecinos de Vallcarca se movilizan contra el desalojo y posterior derribo de los edificios, situados en la avenida de Vallcarca y en la calle de Farigola. En estos inmuebles, viven desde hace años unas cuarenta personas, entre las cuales hay 13 menores.
El Ayuntamiento ha solicitado el desalojo forzoso
A principios de julio, ante una concentración masiva de vecinos, los servicios municipales se presentaron en Vallcarca para intentar conseguir el desalojo administrativo voluntario, es decir, para conocer la situación de los edificios, comprobar que aún están ocupados y constatar que los vecinos que viven allí no quieren irse. Posteriormente, el Ayuntamiento se ha dirigido al juzgado para solicitar el desalojo forzoso, como ocurrió con el asentamiento de barracas que había al lado.
El desalojo y derribo de los edificios son para la construcción de la prolongación de la rambla verde de Vallcarca, el parque central del barrio y la edificación de viviendas públicas y un equipamiento.
Ultimátum de Barcelona en Comú
Hace unos días, Barcelona en Comú dijo que romperá las negociaciones con Collboni sobre cualquier tema si no detiene los desalojos de Vallcarca. La formación, que en el Ayuntamiento lidera Janet Sanz, ha acusado al gobierno de actuar como un “fondo de inversión o una entidad financiera” sin “ningún rastro de humanidad”.