La mayor parte de la oposición del Ayuntamiento de Barcelona –Junts per Barcelona, Barcelona en Comú, ERC y PP– han forzado la celebración de un plenario extraordinario para abordar el conflicto de las guarderías municipales de Barcelona. El gobierno de Jaume Collboni comunicó a 200 trabajadoras de la bolsa de interinaje que perderían el empleo. El plenario ha exigido al ejecutivo socialista que rectifique y garantice que todas estas personas tendrán trabajo el próximo curso. Bajo la presión de la oposición, el alcalde ha asegurado que todo el personal tendrá continuidad y que se está negociando con los sindicatos. A pesar de las palabras de Collboni, el plenario concluyó sin una solución concreta al problema.
El texto presentado por 29 concejales del plenario municipal es muy claro y pide al gobierno del PSC una rectificación, una solución antes del 1 de agosto para la plantilla de las guarderías municipales. Dice así: «Garantizar que las educadoras y maestras afectadas de manera inmediata por el dimensionamiento de plantilla tengan garantizada una plaza al principio de curso, si es necesario por la vía de la ampliación de plantilla en las guarderías municipales generando las plazas necesarias». La oposición también exige que la garantía del puesto de trabajo se comunique urgentemente a las maestras y educadoras antes del 1 de agosto. La proposición ha sido aprobada por Junts, los Comunes, ERC y PP, mientras que el PSC y Vox se han abstenido.
Collboni enmienda a Rabell
Después de semanas de no hablar con nadie, según ha denunciado la oposición en el plenario, el concejal de Educación, Lluís Rabell, ha dicho que se ha sentado con los sindicatos para intentar resolver la situación. Rabell, muy criticado por el resto de partidos por su falta de empatía, ha dicho que «las negociaciones van por buen camino y llegarán a buen puerto». Collboni también ha intervenido y ha enmendado a Rabell. El alcalde ha garantizado que todo el personal tendrá continuidad, tanto en los puestos de trabajo temporales como en los estructurales, y que se trabaja por una solución acordada y negociada con los sindicatos, dentro de la Mesa General. «Espero que se llegue a un acuerdo satisfactorio», ha subrayado Collboni.

Los Comunes califican al gobierno de Collboni de «déspota»
Todos los grupos de la oposición se han mostrado muy críticos con el PSC. La concejala de Junts, Neus Munté, ha censurado que el gobierno no ha hablado con los sindicatos ni con las trabajadoras, «hasta dos horas antes del plenario». El edil de Barcelona en Comú, Pau Gonzàlez, se ha referido al gobierno de Collboni como «déspota«. Desde las filas del PP, el concejal Víctor Martí de Villasante ha arremetido contra los socialistas por no haberse sentado y no haber dialogado. «Solo se han movido por la presión de la oposición y de los sindicatos». Y la concejala de ERC, Rosa Suriñanch, ha exigido que «todas las maestras que se han quedado sin trabajo puedan continuar con sus tareas».
Manifestación de las trabajadoras en la plaza de Sant Jaume
Horas antes de la celebración del plenario, las trabajadoras de las guarderías se manifestaron en la plaza de Sant Jaume. Sònia Fernández, portavoz de Bressol en Lluita, resumió la problemática. El gobierno de Jaume Collboni decidió llevar a cabo un cambio de ratio en los centros educativos. Actualmente, un 50% son maestras y un 50% educadoras. Y a partir del próximo curso, el ejecutivo socialista trabajaba con la idea de que fueran un 27% maestras y un 73% educadoras. Según la portavoz de las trabajadoras, 200 personas de la bolsa de interinaje perderán el empleo. Así era antes del plenario, hasta que Collboni dijo que todos tendrán continuidad sin concretar cómo.