La construcción de la nueva comisaría de la Guardia Urbana en Sarriá Sant Gervasi costará 19,9 millones de euros. La Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de Barcelona aprobó la semana pasada la dotación del dinero para la nueva Unidad Territorial de la policía barcelonesa en el distrito, que se trasladará después de casi cuatro décadas compartiendo espacio con la Escuela Municipal de Música, en la finca de Can Ponsic, en el número 55 de la avenida J. V. Foix, en el barrio de Sarrià. Las obras tendrían que estar listas a finales de 2026.
La nueva comisaría supondrá un gran salto para la Guardia Urbana del distrito. El espacio actual tiene 1.239 metros cuadrados distribuidos en dos plantas, mientras que el nuevo edificio, exclusivo para la policía barcelonesa, tendrá seis plantas y 3.887 metros cuadrados útiles. Estará ubicado en el número 103-109 de la misma avenida J. V. Foix, a tocar de la ronda de Dalt y de la rotonda de Can Caralleu. Según ha explicado el Ayuntamiento, el nuevo edificio no solo acogerá los 140 agentes de la Urbana adscritos a Sarrià-Sant Gervasi, sino que también servirá para acomodar a los agentes de las nuevas promociones.

Una prioridad para el PSC
El consejero del distrito de Sarrià-Sant Gervasi del PSC, Blas Navalón, explicaba hace unos meses que la nueva comisaría es una “actuación prioritaria” del gobierno municipal. Desde un primer momento, los socialistas condicionaron el proyecto a la aprobación de los presupuestos y ahora que parece claro que Jaume Collboni los tendrá que salir adelante a través de una cuestión de confianza, ya se puede licitar la obra. La aprobación inicial del proyecto ejecutivo se hizo efectiva el 19 de septiembre y entonces se cifró el coste en unos 17 millones.
Con el traslado de la comisaría, el Ayuntamiento cumplirá, por fin, con la última voluntad del propietario de la finca de Can Ponsic, que cedió la finca al consistorio en 1978 para que se hiciera un conservatorio de música. Pero antes de que la música llegó la policía. La Guardia Urbana se instaló en 1986 y no fue hasta en 1992 que se puso en marcha la Escuela Municipal de Música Can Ponsic.
Mucha presión de los sindicatos policiales
Los sindicatos de la Guardia Urbana hace años que reclaman la nueva comisaría, igual que la de San Andreu, que está pendiente de construirse en la calle del Potosí, en un solar que tenía usos educativos y que el exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, reconvirtió en 2020. El policía y miembro de UGT, José Casas, criticaba hace unos meses al TOT Barcelona que el Ayuntamiento no hubiera confirmado ningún calendario de obras y lamentaba que la pandemia retrasó las dos comisarías, que se tenían que poner en marcha en tiempos récord.