Manuel Valls salió de la política francesa por la puerta trasera. Cuestionado por Macron y por el pueblo francés, aterrizó en Barcelona, de la mano de Ciudadanos, para engordar su lista de fracasos electorales. Acabó invistiendo a Colau y se fue. También por la puerta trasera y sin resurgir políticamente. Años más tarde, Valls regresa a la primera línea de la política, esta vez rescatado por François Bayrou, el nuevo primer ministro francés, que le ha encargado la cartera de Ultramar.
Valls formará parte del nuevo gobierno de Bayrou, que aterriza como primer ministro después de que el excomisario europeo Michel Barnier fuera destituido por el parlamento francés. Bayrou, que de entrada deberá conseguir una mayoría que desbloquee las cuentas francesas, ha nombrado un gobierno continuista, con perfiles próximos a Macron y a la derecha francesa. En el gabinete aparecen nombres de la vieja guardia francesa como Gérald Darmanin, que fue ministro del Interior y ahora ocupará Justicia, o Élisabeth Borne, que, como Valls, también fue primera ministra. El exlíder de Ciudadanos en Barcelona ocupó el departamento de Interior entre 2011 y 2014 y lideró el ejecutivo francés los dos años siguientes.

Mala relación con Macron
Valls volverá a coincidir con Macron, de quien no guarda buen recuerdo. En su última etapa en Francia, el exlíder de Ciudadanos tuvo más de un encontronazo con el ahora presidente de la república, entonces ministro de economía de su ejecutivo. La mala relación entre ambos no es ningún secreto. De hecho, en una entrevista en TOT Barcelona, el militante ecologista y responsable durante años de las relaciones internacionales del partido Los Verdes, Patrick Farbiaz, detalló algún episodio «grosero» que muestra la mala mar que había entre ambos.
«Macron había dicho en una entrevista que el crecimiento económico estaba a medio palo. Y, por la tarde, cuando llegó a la Asamblea Nacional para la sesión de control al gobierno, las cámaras grabaron cómo Valls se encaraba con Macron, pero no se escuchó qué le decía. Solo lo oyeron los ministros, desde el banco del gobierno. Royal lo ha explicado después en un libro. Dice que Valls preguntó, encendido, a Macron: ‘¿La polla también la tienes a medio palo?’ Es muy grosero», explica Farbiaz en esta conversación, de 2019.