El 17 de junio de 2023, a las 16 h, se hizo pública una operación de Estado que tenía por objetivo impedir un gobierno independentista en la capital catalana. Una aritmética hasta entonces inédita, y que, como se explicó, estaba gestada en los despachos del PSOE y el PP en Madrid con el objetivo de dejar al ganador de las elecciones, Xavier Trias, sin la vara de alcalde que minutos antes todos daban por hecha. Aquel pacto remachaba la maniobra que cuatro años atrás también había apartado al republicano Ernest Maragall de la alcaldía, a pesar de ser el ganador. Entonces, en plena represión contra los líderes políticos y sociales del 1-O, Ada Colau aceptaba la propuesta del PSC de ser socios de gobierno con la condición de ser investida con los votos de la derecha de Manuel Valls aunque la candidata de Barcelona en Comú no había ganado las elecciones. Una hora antes del plenario de investidura, el candidato del PSC se aseguraba los votos para gobernar con un apoyo que parecía imposible: Barcelona en Comú y PP. Pero aquella aritmética de la investidura de Jaume Collboni no se ha trasladado al pleno del Ayuntamiento: cero acuerdos entre PP, Comuns y PSC. Cero propuestas aprobadas con este frente antiindependentista.
De hecho, de las ochenta propuestas presentadas por los grupos municipales de impulso y control en los plenos municipales entre junio de 2023 y enero de 2025, sólo en ocho ha coincidido el sentido del voto del PSC, Comuns y PP. Las propuestas al pleno son la parte más política de la acción de los grupos municipales, donde se fija de forma más evidente el posicionamiento ideológico de los partidos. Quedan fuera de este análisis la parte resolutiva de los plenos -los asuntos ordinarios de gestión del Ayuntamiento- y las comisiones, es decir, los grupos de trabajo que se encargan de preparar los temas que se debatirán posteriormente en el pleno y donde están representados los grupos municipales.

PSC-Comuns, ERC, la alianza más repetida
De las 80 propuestas que se han debatido y votado en los plenos bajo la vara de alcalde de Collboni, la aritmética también es curiosa. Cero acuerdos en solitario de PSC-PP-Comuns, pero también cero acuerdos Junts-ERC (los dos partidos que tenían que gobernar en solitario la ciudad una hora antes del pleno de investidura) en solitario, y sólo dos acuerdos entre PSC y ERC (sin contar el acuerdo de presupuestos en dos ocasiones), que aún tienen pendiente materializar un pacto de gobierno. De todas las combinaciones posibles en las votaciones, destacan las propuestas rechazadas en las que solo hay el voto afirmativo de PP y VOX: son 13 en total, a las que se suman 6 de VOX en solitario. Pero de las aprobadas, es el llamado tripartito de los 24 concejales de izquierdas que inicialmente Ada Colau defendía para formar gobierno. PSC, ERC y Comuns se han encontrado -solos pero con mayoría absoluta- en 12 votaciones. En segundo lugar, la aritmética que más se ha repetido en los plenos desde septiembre de 2023 es la suma de Junts, Comuns y ERC, en 10 ocasiones, seguida del bloque PSC-Junots-Comuns y ERC, con 8 propuestas aprobadas.
Después, 5 propuestas fueron rechazadas con el voto afirmativo de Junts, VOX y PP, 4 fueron aprobadas con el sí de PSC, Junts, Comuns, ERC y PP, 4 más con el voto afirmativo de PSC, Junts, PP y VOX, 3 más tuvieron el voto afirmativo solo de Comuns y Junts. También 1 propuesta salió adelante con la aritmética del sí de PSC y Junts. Por otro lado, una sola propuesta salió adelante con el voto afirmativo de todos los partidos excepto el PP, y en 4 ocasiones el pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado una propuesta con la plena unanimidad de los 41 concejales municipales. De la consulta de todas las votaciones también se observa que los Comuns se han quedado totalmente solos en dos votaciones y el PP en una.
También se ha producido alguna otra alianza curiosa, como la de Junts, ERC, PP y VOX, Junts, Comuns y PP también en una ocasión, PSC, Junts, VOX y PP, y también en una votación, PSC, PP y VOX.

Dónde ha coincidido el voto del tripartito de investidura con otros partidos
De hecho, la intersección de Comuns, PP y PSC sólo se ha producido en ocho propuestas, donde los tres partidos votaron afirmativamente. El PSC consiguió el voto de todos los partidos excepto VOX en una propuesta con contenido de declaración institucional para dar visibilidad al Consejo Asesor de la Gente Mayor. También los socialistas sacaron adelante una propuesta para Declarar el abuso de las redes sociales, solo con el voto en contra de VOX. El PP, por su parte, consiguió la unanimidad de los 41 concejales con una propuesta para la promoción cultural del barrio del Call. En cuanto a los Comuns, consiguieron el voto de los 41 concejales con una propuesta que instaba al alcalde a liderar la congelación de tarifas del ATM en 2024.
Y a partir de aquí, la coincidencia entre los partidos que el 17 de junio de 2023 se conjuraron contra el pacto independentista se ha producido, justamente, a iniciativa de los dos partidos damnificados. Junts Barcelona -antes Trias per Barcelona-Junts, ha impulsado en este mandato dos propuestas, sobre infancia -elaborar una estrategia integral de ciudad para combatir la pobreza infantil- y sobre seguridad y prevención ante amenazas terroristas, que han conseguido la unanimidad del pleno. En el caso de ERC, los republicanos han conseguido el consenso de todas las fuerzas, excepto VOX, en una propuesta para rechazar cualquier propuesta de reducción de los días de pesca a la flota de pesca de arrastre del Mediterráneo. Con la misma aritmética, los republicanos aprobaron en pleno una propuesta que reclamaba impulsar políticas de rehabilitación y regeneración urbana para revertir los problemas de accesibilidad y de habitabilidad.
Con estas cifras en el plenario municipal se hace evidente que el pacto de investidura de Jaume Collboni era puramente instrumental. El PSC lograba la alcaldía tras tres intentos, el PP podía vanagloriarse de haber bloqueado el paso al independentismo y los Comuns utilizaban el argumento de haber dado a Barcelona un alcalde de izquierdas.




