La nueva Comisionada de la Noche de Barcelona, un cargo que Jaume Collboni había rebautizado previamente como alcaldesa nocturna, se ha presentado en masa en la comisión de presidencia de este miércoles. Carmen Zapata ha marcado perfil, ante el resto de concejales, asegurando que no viene «únicamente» a ser mediadora y que, entre sus funciones, también estará «encargar informes» e impulsar «propuestas de gobierno».
Zapata también ha dicho que quiere ir más allá de la seguridad, si bien es cierto que su comisionado dependerá de la tenencia de Seguridad, comandada por Albert Batlle. La elegida para gestionar la noche barcelonesa, que apenas lleva semana y media en el cargo, ha encargado información de informes con las zonas de concentración nocturnas, el mapa sonoro de Barcelona o cómo están funcionando las medidas en las zonas acústicamente más tensadas, según ha explicado ella misma durante la intervención. Zapata también ha iniciado una ronda de contactos con diferentes entidades del Consejo de Noche para tener una radiografía «íntegra» de la situación.
Más licencias de ocio nocturno
En su primera gran intervención como comisionada, Zapata ya ha mostrado signos de por dónde irá la nueva figura creada por Collboni. «Barcelona necesita más licencias y espacios de ocio y cultura», ha comentado, matizando, en todo caso, que hay que asegurarse de que esta nueva oferta «no vulnere el derecho al descanso de los vecinos, que es fundamental». En este sentido, meses atrás, el gremio de discotecas apuntaba que la oferta de ocio nocturno es muy desigual y que hay barrios con una densidad muy alta y otros, directamente sin oferta. «A veces se ha puesto el foco solo en los deberes, y no en el fomento», ha dicho hoy la comisionada.
Una postura que choca frontalmente con los Comuns, que le han recordado que el derecho al descanso y la salud están «por encima» del derecho a la fiesta. El concejal Jordi Rabassa, que esta semana también está de estreno después de sustituir la vacante que ha dejado Ada Colau, ha pedido más inspectores y más mediadores culturales.
ERC ha celebrado la llegada del cargo y le ha pedido que hable «con todos», con una mención especial a los jóvenes. Y Trias per Barcelona ha exigido «liderazgo político». Ha incidido en el hecho de que la noche de Barcelona es «oscura y sucia» y ha pedido ir más allá de la mediación. “Si la Comisionada de la noche lo único que hace es mediar no será suficiente, hay una cuestión de autoridad política”, ha comentado Jordi Martí.
Por otro lado, el PP ha criticado que esta nueva figura «estigmatiza el sector de la noche». El presidente del grupo popular, Daniel Sirera, ha señalado el incivismo como principal problema de las noches de Barcelona, una radiografía prácticamente calcada a la que ha hecho Vox.
