ERC exige el nombramiento urgente del comisionado o comisionada del catalán. Así lo ha expresado este martes por la mañana la presidenta republicana en el Ayuntamiento, Elisenda Alamany, pocos días después de que saliera a la luz pública la polémica del gag catalanófobo durante la presentación del informe del Observatorio de las Discriminaciones en Barcelona, de la Oficina por la No Discriminación del Ayuntamiento de Barcelona. Alamany se ha reunido con el alcalde, Jaume Collboni, y ha asegurado que tiene su compromiso de que la persona que pilotará las políticas lingüísticas municipales se dará a conocer «en pocos días».
Alamany no ha adelantado quién ocupará este cargo, ya que corresponde al ejecutivo socialista presentarlo, como hizo hace unas semanas con José Antonio Donaire como nuevo comisionado de turismo. Según ha podido saber TOT Barcelona, el anuncio del nuevo comisionado del catalán podría hacerse esta semana. Para Alamany, este nombramiento tendrá lugar por la «presión» republicana, pero ha querido dejar claro que la elección ha sido del gobierno. Esta será la primera vez que el consistorio barcelonés tendrá un comisionado del catalán. El nombramiento está pendiente desde mayo.
El gag catalanófobo, un espectáculo «lamentable»
En su comparecencia ante los medios de comunicación, Alamany ha remarcado que el gag catalanófobo -protagonizado por la compañía Teatro Sin Papeles- fue un espectáculo «lamentable» y ha subrayado que Collboni no puede limitarse a pedir disculpas, sino que debe acelerar las propuestas que permitan potenciar el uso del catalán. Entre las labores que deberá activar el nuevo comisionado figuran crear una oficina de la lengua catalana y una mesa de expertos como elementos fundamentales de la futura estructura lingüística del Ayuntamiento.

Garantizar el uso del catalán en el sector de la restauración
ERC y el gobierno de Collboni han pactado también impulsar una fábrica de contenidos audiovisuales en catalán que, según Alamany, debe estar en funcionamiento en 2027, y ahora los esfuerzos se centran en encontrar la ubicación y la persona que la dirigirá. La presidenta republicana en el Ayuntamiento ha recordado también la necesidad de poner en marcha las 68 medidas, pactadas con Collboni y Junts el mandato pasado, para fomentar el uso del catalán y garantizar la presencia del catalán en el sector de la restauración, tal como acordaron en febrero ERC y el Gremio de Restauración.
Para Alamany, es fundamental que las políticas lingüísticas que se impulsen desde el Ayuntamiento permitan en un par de años mejorar la situación del uso social del catalán, ahora bastante preocupante por el escaso uso que hace la ciudadanía de manera habitual, especialmente entre los jóvenes. Y en este sentido ha asegurado que se necesitan más cursos de catalán y dinero para subvenciones que queden reflejados en el presupuesto municipal de 2026.


