El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado una proposición de ERC para el traslado de la Jefatura Superior de Policía de Cataluña al complejo policial de la Verneda o a cualquiera de las otras dependencias que el Ministerio del Interior tiene en la ciudad. Con esta iniciativa, los republicanos buscan evitar «que el inmueble de la jefatura de Via Laietana tenga que compatibilizar la función como lugar de memoria democrática con los usos policiales», como se ha decidido. Al mismo tiempo, la presidenta de ERC en el Ayuntamiento, Elisenda Alamany, ha pedido la transformación del edificio en un centro de memoria y documentación sobre la represión franquista y la lucha por las libertades democráticas.
El texto de los republicanos ha salido adelante con los votos favorables de Junts per Barcelona y Barcelona en Comú. Por su parte, el PSC se ha abstenido y PP y Vox se han posicionado en contra.
Restitución de la documentación propiedad del Ayuntamiento
Al mismo tiempo, la demanda de ERC plantea «la inmediata restitución de la documentación propiedad del Ayuntamiento de Barcelona, para que sea reintegrada al Archivo Municipal, y de todos los documentos que fueron confiscados por el régimen franquista y que aún permanecen en manos del Estado, al Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca (antes Archivo General de la Guerra Civil Española)», recoge la proposición republicana.
ERC ha presentado esta proposición en el pleno de noviembre coincidiendo con los 50 años de la muerte de Franco, un aniversario que se cumplió el 20 de noviembre. Según Alamany, «a pesar de haber transcurrido medio siglo desde la muerte del general Francisco Franco, la sociedad barcelonesa -y catalana, por extensión- aún arrastra numerosas consecuencias de los cuarenta años de dictadura, así como deudas pendientes de memoria y de justicia hacia muchas de sus víctimas», dijo en el pleno.
ERC quiere que la prisión de mujeres de la Trinitat sea un BCIN
El texto republicano también hace referencia al hecho de declarar la prisión de mujeres de la Trinitat Vella como un bien cultural de interés nacional (BCIN). Tal como explicó el TOT Barcelona, el gobierno de Collboni se opone porque entraría en «colisión» con el proyecto de construir viviendas y equipamientos en la zona y la prisión no se podría derribar. Según ERC, los usos futuros de vivienda y equipamientos previstos en la prisión son compatibles con la declaración del inmueble como BCIN.
