Los presupuestos participativos son una herramienta que el gobierno de los Comuns, con Ada Colau como alcaldesa, activaron para dar salida a proyectos propuestos por la ciudadanía. Los primeros corresponden al período entre los años 2020 y 2023 y, según detalla el Ayuntamiento en la web Decidim Barcelona, el grado de ejecución es del 84,2% [ver aquí]. El alcalde Jaume Collboni ha dado continuidad a esta iniciativa y entre los días 12 y 17 de mayo, el vecindario de la capital catalana podrá votar cuáles son los proyectos que se realizarán hasta el año 2027, con una limitación presupuestaria de 30 millones para todos los distritos de la ciudad.
De las cerca de 800 ideas iniciales, 253 han pasado a la fase final. Del total, 25 corresponden al distrito de Ciutat Vella; 25, a l’Eixample; 25, a Sants-Montjuïc; 25 a les Corts; 26, a Sarrià-Sant Gervasi; 25, a Gràcia; 27, a Horta-Guinardó; 25, a Nou Barris; 25 a Sant Andreu, y 25 a Sant Martí. Económicamente, el consistorio destinará tres millones de euros a Horta-Guinardó; 3,6 millones, a Ciutat Vella; tres, a l’Eixample; 3,6, a Sants-Montjuïc; dos, a les Corts; 2,2, a Sarrià-Sant Gervasi; 2,2, a Gràcia; 3,6, a Nou Barris; 3,2, a Sant Andreu, y 3,6, a Sant Martí. Como en la anterior edición, se ejecutarán los proyectos más votados de cada distrito hasta agotar las partidas asignadas.

Votos a través de web y en puntos presenciales
Todas las iniciativas se pueden consultar en el enlace y se podrán votar a través de la web Decidim Barcelona y en puntos presenciales en los barrios de la ciudad que se darán a conocer más adelante, subrayan fuentes municipales, como ya se hizo en la fase inicial de los presupuestos participativos, cuando se habilitaron 123 emplazamientos. Las iniciativas presentadas hacen referencia a mejoras del espacio público y de equipamientos municipales, y a la adquisición y rehabilitación de bienes de uso público. Por ejemplo, entre las propuestas presentadas hay transformaciones de calles, ampliación de zonas peatonales, mejoras de entornos escolares, incorporación de verde urbano… También se podrán votar nuevos usos para equipamientos públicos, reformas de accesibilidad y mejoras de patios y terrazas, y compra de equipamientos.
No obstante, de las 253 iniciativas seleccionadas habrá algunas que caerán y no se podrán votar. Fuentes municipales dicen al TOT que la semana próxima se hará público el listado definitivo de los proyectos que irán a la votación final, «una vez los servicios técnicos, junto con los promotores, hayan terminado de llevar a cabo las tareas de concreción de cada uno de los proyectos que se votarán». Con el listado, el Ayuntamiento hará públicos los motivos por los cuales ha desestimado algunos proyectos.
Cae la ampliación del eje verde de Girona
Por el momento, se sabe que la ampliación del eje verde de la calle de Girona hasta la calle de Còrsega que proponía la asociación de vecinos de la Dreta de l’Eixample no se realizará. La entidad ha terminado renunciando porque el consistorio quería hacer un carril de circulación en el centro y ampliar solo las aceras. Según el presidente de la asociación Jaume Artigues, el gobierno de Collboni no quiere continuar con los ejes verdes, ha dicho al TOT Barcelona. Fuentes municipales subrayan que los promotores han decidido retirar la propuesta porque no aceptan las condiciones técnicas que planteó el Ayuntamiento. «La normativa de presupuestos participativos prevé que los proyectos que no están alineados con las políticas de mandato, que no se ajustan a la previsión presupuestaria, que no cumplen las condiciones establecidas, que chocan con la normativa urbanística o perjudican otro proyecto ya previsto en la misma zona, se pueden condicionar o incluso no aceptar».
En Ciutat Vella, entre las iniciativas seleccionadas, se propone hacer un Raval para jugar, transformar la rambla del Raval y las plazas adyacentes, mejorar la plaza de Sant Agustí y el paseo de Lluís Companys y garantizar el acceso a las playas de Ciutat Vella de manera autónoma a las personas con movilidad reducida. También se quiere renovar y modernizar el casal municipal de personas mayores Mediterrània, hacer las calles de la Cera y la Rumba Catalana más dignas y habitables, instalar un ascensor en el centro de formación de adultos del barrio Gòtic y mejorar el entorno de la plaza de Salvador Seguí.

En l’Eixample, se pide un espacio autogestionado para jóvenes en el barrio de la Sagrada Família y hacer una avenida de Roma más paseable y jugable. También se plantea recuperar chaflanes de l’Eixample para los peatones. En la edición anterior, una de las iniciativas era hacer ecoxamfrans en diferentes cruces de Aragón, pero el proyecto fue tumbado por el gobierno de Collboni, ya que solo se ejecutó uno. Además, se propone habilitar un carril bici en la ronda de la Universitat, desde la ronda de Sant Pere hasta la plaza de la Universitat; destinar la avenida Gaudí para usos del barrio y garantizar la continuidad para los peatones en esta calle, y renovar los parques infantiles de la avenida de Mistral y del barrio de Fort Pienc.
Pacificar calles en Sants-Montjuïc
Por otro lado, en Sants-Montjuïc, algunos vecinos piden que se pacifiquen los entornos escolares de los centros educativos Institució Montserrat, Cal Maiol, Proa y Sant Medir. Además, se solicita pacificar las calles de Begur, Olzinelles y la Constitució, y hacer mejoras en el campo de rugby de la Foixarda, el campo de fútbol de la Satalia, el polideportivo de las Tres Xemeneies y el Club Natació Montjuïc. También se han presentado proyectos para crear en la plaza de Margarida Xirgu un parque infantil inclusivo, una área para perros, un circuito saludable, espacios verdes, fuentes de agua y renovar la iluminación. Además, se quiere mejorar los espacios infantiles y las plazas del barrio la Bordeta, y reurbanizar la plaza de Joan Corrades.

Ampliar el carril bici de la travessera de les Corts
En les Corts, las iniciativas vecinales incluyen renaturalizar el patio de la escuela Barcelona, ampliar el carril bici de la travessera de les Corts, ejecutar mejoras en el núcleo antiguo del barrio de les Corts, y rehabilitar los jardines de la Torre Girona y las casetas de la Colònia Castells, un proyecto detenido por el PSC en la edición pasada. También se quiere remodelar la planta infantil de la biblioteca de les Corts-Miquel Llongueras, así como el carril bici de la Diagonal, entre Pius XII y Numància (añadiendo un carril de tierra para correr), y hacer reformas en el centro cívico Tomasa Cuevas.
En Sarrià-Sant Gervasi, se propone arreglar y pacificar los entornos escolares de una decena de centros educativos, poner escaleras mecánicas entre las plazas de Vallvidrera y Pep Ventura, y comprar el ateneo popular de Sant Gervasi de Cassoles. Y habilitar un carril bici entre las calles de Fontcoberta y Capità Arenas, soterrar las líneas eléctricas aéreas del barrio de les Tres Torres, y rehabilitar los jardines de la Vil·la Amèlia y de Vil·la Cecília.

Renovar el estadio del Nou Sardenya
En Gràcia, una de las propuestas destaca mucho por encima de las otras. Se trata de la renovación del estadio del Nou Sardenya. También se plantea hacer un jardín del silencio abierto a todos en la Vila de Gràcia y mejorar diferentes patios escolares de centros del distrito, como los de Sagrada Família, Patronat Domènech y Reina Violant. También se quiere adecuar el polideportivo de la Creueta del Coll, convertir en zona peatonal la calle de Pau Alsina, entre la travessera de Gràcia y Pi i Margall, mejorar la plaza de las Dones del 36 y la placita de Sant Miquel, y renovar el centro cívico de la Sedeta.
Entre las propuestas seleccionadas en Horta-Guinardó destacan instalar una marquesina cubierta en el campo de fútbol del Martinenc, la cobertura y adecuación de la pista de hockey patines de la Clota, ampliar la biblioteca del Guinardó-Mercè Rodoreda y pacificar los entornos escolares del centro educativo Pàlcam (Baix Guinardó). Además, se plantea construir graderías y vestuarios, mejorar la accesibilidad y adecuar los alrededores del campo de rugby de la Teixonera, remodelar la calle de l’Encarnació (entre Padilla y Sardenya), con más aceras y árboles; ampliar el casal de barrio de la Font d’en Fargues, hacer entornos seguros y amables en las escuelas Pit-Roig, Àngels Garriga y Torrent de Can Carabassa, y mejorar el área de juegos infantiles de la entrada del parque de les Aigües.

Escuelas, iluminación y cambio climático
En Nou Barris, entre las iniciativas vecinales está la mejora del patio de la escuela El Turó de Barcelona, adaptar el edificio de primaria del instituto Oriol Martorell al cambio climático, acondicionar el circuito de atletismo alrededor de Can Dragó, y renovar la iluminación en el paseo de Fabra i Puig, la plaza de Virrei Amat y la plaza de Garrigó. Por otro lado, se quiere reurbanizar la plaza de Nou Barris (en la Prosperitat), rehabilitar el centro de formación de personas adultas Madrid (en el barrio de Porta), renovar la biblioteca de Canyelles-Maria Àngels Rivas, y hacer un carril bici en calzada de la calle del Pintor Alsamora hasta Fabra i Puig.
En Sant Andreu, destaca llevar adelante el proyecto ejecutivo del polideportivo municipal del barrio del Congrés-Indians (en el Canòdrom), mejorar la pista polideportiva municipal de la Sagrera, reurbanizar y ampliar la acera del lado de mar, frente al estadio municipal Narcís Sala, y arreglar los alrededores de la estación de autobuses de Fabra i Puig y Sant Andreu Arenal. También se ha puesto sobre la mesa reformar la plaza de l’Assemblea de Catalunya, construir el primer parque acuático de la ciudad en la plaza del General Moragues, rehabilitar y modernizar el centro cívico de la Sagrera, y remodelar el auditorio y la sala de exposiciones Antoni Arissa, de la biblioteca Ignasi Iglésias-Can Fabra.
Pacificar cinco escuelas del Poblenou
En Sant Martí, el vecindario propone pacificar los entornos de cinco escuelas del Poblenou, así como renovar el Instituto Icària (en la Vila Olímpica), y rehabilitar la escuela Casas para potenciar sus valores históricos, educativos, ambientales y sociales. Además, se plantea arreglar el parque del Clot, pacificar las calles de Joan de Peguera, Coll i Vehí y Ruiz de Padrón (en el Camp de l’Arpa), instalar barandillas en las playas (en el ámbito de Diagonal Mar y el Front Marítim del Poblenou), y crear una red de refugios para gatos comunitarios, una iniciativa que se repite en otros distritos.
En la primera fase de las votaciones de la segunda edición de los presupuestos participativos participaron cerca de 30.000 personas que dieron más de 103.000 apoyos a propuestas presentadas. No obstante, el hecho de que la ciudadanía elija algún proyecto no es una garantía total de que se termine ejecutando. El gobierno de Collboni detuvo nueve en la edición pasada, entre los cuales estaba el carril bici de la plaza de Catalunya, aunque en el momento en el cual el TOT Barcelona publicó una información el Ayuntamiento había confirmado ocho.