El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, no ha cumplido con su palabra. Mientras durante la campaña electoral se comprometió a «revocar» la pacificación de la ronda de Sant Antoni impulsada por los Comuns, este jueves su gobierno se ha hecho atrás. La teniente de alcaldía, Laia Bonet ha explicado que finalmente el Ayuntamiento tirará adelante la reforma de los Comuns. “Lo hacemos por responsabilidad y porque si hay algún consenso hay que actuar cuanto antes mejor”, ha reconocido.
Este giro de guion no ha tardado en generar reacciones. La plataforma de afectados de la Llosa de Sant Antoni, partidaria de revocar la última reforma propuesta y hacer realidad el proyecto del 2018, ha mostrado su indignación a través de un comunicado. «El señor Collboni, alcalde socialista de la ciudad de Barcelona gracias a los votos de ciudadanos que creyeron en su palabra, nos ha traicionado con argumentos interesados. Una de sus traiciones ha sido que durante toda su campaña electoral prometió que la reforma de los Comuns de la ronda Sant Antoni no se llevaría a cabo», han dicho. «Todavía está a tiempo. Reclamamos que se mantenga el compromiso socialista con los vecinos», han añadido a la espera de otro cambio de opinión.
La reacción de las fuerzas políticas
Como era de esperar, muy diferente ha sido la reacción del partido del exalcaldessa Ada Colau, que, también ha recordado que el proyecto «cuenta con el apoyo de 50 asociaciones”. «Esta noticia recoge el trabajo que las fuerzas políticas de izquierdas hemos hecho más allá de los debates vinculados a un proceso de elecciones”, ha dicho Janet Sanz y, a la vez, ha dejado claro su compromiso para que “el conjunto de las rondas tenga una transformación que de una vez por todas piense la relación entre Ciutat Vella y el Eixample”.
En las antípodas de este posicionamiento se encuentra el del grupo municipal de Trias per Barcelona, que ha criticado la última jugada del PSC. El portavoz del grupo municipal, Jordi Martí, ha insistido, entre otros, que este cambio de opinión quiere decir que “el gobierno Collboni empieza con un incumplimiento flagrante de su palabra”.
