La polémica decisión de la coctelería Boadas de vetar la entrada a un grupo de personas porque llevaban la camiseta de la ANC ya tiene réplica. El conocido local barcelonés ha ofrecido una respuesta confusa y contradictoria a los clientes que denunciaron al establecimiento ante la Agencia Catalana de Consumo por haberles dado un trato discriminatorio cuando fueron a tomar algo después de la manifestación de la ANC por el aniversario del 1-O.
En un correo enviado a uno de los afectados, al cual ha tenido acceso el TOT Barcelona, un responsable de Boadas Cocktail confirma que el local tiene un código de vestimenta para garantizar que sus clientes “se sientan ciertamente cómodos los unos con los otros en un mismo espacio”. Según el correo, las reglas de vestimenta “se basan en evitar, indumentaria de playa, bañadores, chanclas, camisetas de equipos de fútbol, lemas políticos o de ideologías políticas” porque creen que ciertos mensajes podrían “llegar a incomodar a otros clientes”.
Versiones contradictorias de la coctelería
Esta primera explicación confirmaría la versión del grupo de personas que se pusieron en contacto con este diario para denunciar la situación. Sin embargo, el local asegura en el mismo correo que “después de estudiar el caso” han concluido que el camarero no les dejó acceder por un “tema de aforo”. Para añadir algo más de confusión, el responsable se despide pidiendo “disculpas” por si el código de vestimenta “ha generado alguna molestia” al grupo, así que de manera implícita reconoce que efectivamente fue una cuestión relacionada con la indumentaria que llevaban.
Este diario intentó contactar por teléfono con los responsables de la coctelería, pero fue imposible. Después de consultar el correo, el TOT Barcelona también intentó hablar con ellos por medio de la dirección electrónica. En esta ocasión el local no ha querido hablar porque el caso está en manos de la Agencia Catalana de Consumo y prefieren esperar a que se esclarezca todo.
