El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, continúa deshojando la margarita de la gobernabilidad. Este martes ha vuelto a reiterar que el futuro pacto de gobierno no se alargará más allá de la primavera, pero insiste en mantener todas las opciones abiertas. De puertas en fuera, Collboni asegura que la presencia de Ada Colau en un hipotético gobierno de coalición «no es necesariamente un impedimento». Tampoco el hecho de que muchos votantes no identifiquen al grupo de Xavier Trias como una fuerza progresista. «Hay gente de Junts en el Ayuntamiento que se califica de socialdemócrata», ha dicho el alcalde esta mañana en una entrevista en TVE. Por otro lado, Collboni ha negado que el pacto de investidura con el PP incluyera la negativa de formar gobierno con los comunes y ha pedido «seriedad» a la oposición –también refiriéndose a las últimas declaraciones de Colau, que niega haber hablado con el alcalde desde noviembre– mientras duren las negociaciones.
En esta conversa, Collboni ha vinculado «la alcaldía por la noche», una propuesta electoral, a la ampliación del gobierno. Es más, el alcalde estaría dispuesto a ceder las atribuciones de esta «alcaldía» al futuro socio de gobierno. «Es una propuesta que reconoce que la ciudad funciona por la noche», ha apuntado Collboni, que ve la alcaldía por la noche como una forma de acercarse al sector de la cultura y del ocio nocturno. El líder socialista en el Ayuntamiento mantiene que Barcelona tiene que asumir el «reto» de gestionar lo que pasa por la noche y de «mediar» entre los vecinos y las empresas. «Se está viendo con el ruido y la actividad nocturna», ha apuntado, citando de ejemplos que se podrían hacer la apertura de centros deportivos nocturnos o alternativas de ocio para la gente joven.
La inseguridad continúa preocupando
Con el cambio de gobierno, ahora en manos socialistas, no ha rebajado la preocupación por la inseguridad. El último barómetro, de hecho, situaba esta inquietud en máximos casi históricos. Collboni ha insistido que Barcelona tiene un problema con la multirreincidencia y ha pedido «incrementar» la planta penal para juicios rápidos. Según el alcalde, este hecho aceleraría los efectos de la nueva ley, que estipula que con tres hurtos se te puede imponer penas de 18 meses de prisión.
Con todo, Collboni ha pedido no vincular delincuencia con inmigración. «Señalar colectivos por la procedencia es peligroso y un error», ha dicho el socialista, que cree que Junts se ha equivocado pidiendo que Cataluña pueda expulsar inmigrantes multirreincidentes.