El Ayuntamiento de Barcelona, en manos de Jaume Collboni, reutilizará la arena de otras obras de la ciudad para poder rellenar las playas de Sant Sebastià, la Mar Bella y Llevant. Se trata de un nuevo mecanismo impulsado por el gobierno municipal para hacer frente al cambio climático que golpea a la población mundial, aunque el mismo Collboni ha admitido este miércoles durante una visita a uno de los puntos de obra donde ya se aplica esta técnica que la medida será «insuficiente». La intervención se enmarca en el Plan clima y permitirá depositar 48.000 metros cúbicos de arena en las tres playas del litoral barcelonés.
Concretamente, 40.000 metros cúbicos de material se extraerán de los trabajos que se realizan para construir los cimientos de la futura ciudadela del conocimiento en el mercado del pescado y se depositarán en la playa Sant Sebastià. Según detallan desde el consistorio, los 8.000 metros cúbicos restantes se obtendrán de unas perforaciones del Bogatell para ampliar la red de distribución de frío y calor. El mismo alcalde barcelonés ha querido dejar claro que reutilizar la arena de otras obras de la ciudad es un mecanismo positivo para el medio ambiente porque se trata de «arena de kilómetro cero» que ya ha formado parte del litoral barcelonés en algún otro momento.
Más aportaciones de la Moncloa
Ahora bien, desde el Ayuntamiento también han recordado que la arena generada en las actuaciones de la ciudad no es suficiente para rellenar las playas, por lo que confían en poder recibir nuevas aportaciones de arena por parte del gobierno español en los próximos meses. De hecho, Collboni ha asegurado que en los meses venideros el gobierno local «explicará las concreciones de las aportaciones que deberá hacer el ministerio de Transición Ecológica para contribuir al mantenimiento del litoral de la ciudad». En esta línea, el jefe del ejecutivo barcelonés ha recordado que la última vez que el gobierno español vertió arena en las playas para mantenerlas fue en el año 2010.
