Aliança Catalana (AC) se presentará a las elecciones municipales de Barcelona de mayo de 2027 y anunciará al candidato o candidata «a más tardar» en abril de 2026. Quien lo explica al TOT Barcelona es el presidente de la formación en el Barcelonès, Jordi Amela. Con dos diputadas en el Parlament de Catalunya -la presidenta del partido y alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols, y Rosa Maria Soberana-, el Centro de Estudios de Opinión (CEO) ha disparado esta semana las expectativas electorales de AC, con un ascenso imparable en Cataluña, ya que obtendría entre 19 y 20 escaños en unas hipotéticas elecciones catalanas, el mismo número que Junts per Catalunya.
Ahora, los esfuerzos de AC se centran en las municipales de 2027. Y Barcelona «es la plaza más importante», reconoce Amela. El partido ha abierto una sede en la capital catalana -planta baja + entresuelo que se encuentra en la calle de Villarroel, 52, esquina con la Gran Via de les Corts Catalanes, en l’Eixample-. En septiembre, una encuesta ya daba a Aliança Catalana el 5% mínimo necesario de votos -entre 37.000 y 38.000- para entrar en el pleno del Ayuntamiento. Y el alcaldable que elijan, el partido espera que sea el «plus» para intentar conseguir mejores resultados en Barcelona. De momento, AC asegura que no ha realizado ninguna encuesta interna para conocer el techo que puede tener en la ciudad. Tras hacerse públicos los resultados del CEO, Orriols subrayaba que no se guiaba por los sondeos sino por lo que decía la calle.
«Fracasar en Barcelona sería importante»
Amela no adelanta nombres de posibles cabezas de lista en la ciudad, aunque reconoce que tienen algunos «encarrilados». Afirma que en ningún caso se ha planteado que el candidato sea Santiago Espot, como el opinador de El Món y exalcaldable de Solidaritat Catalana en Barcelona dejó entrever al TOT. La decisión final la tomarán «sincronizados» el comité de gobierno del partido, que preside Orriols, y el comité ejecutivo de la comarca del Barcelonès. Ahora mismo, no está previsto realizar primarias ni un proceso similar. Y más allá de quién encabece la lista, Amela destaca que quieren dotar al «proyecto» y la «marca» Aliança Catalana en Barcelona de la estructura y la financiación necesaria. «Fracasar en Barcelona sería importante».
AC no tiene previsto formalizar candidaturas en la mayor parte de las poblaciones de Catalunya en las municipales de 2027. «Se primará la calidad sobre la cantidad, con listas con gente que esté claramente comprometida con el proyecto». Además de Barcelona, Amela no confirma ningún otro lugar más allá de Ripoll. En el área metropolitana sí que descartan concurrir en Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià del Besòs. En l’Hospitalet de Llobregat y en Badalona, «el partido está creciendo», pero aún no han tomado una decisión.
El partido más caro para afiliarse, asegura Amela
El presidente del Barcelonès de Aliança Catalana pone cifras a los afiliados del partido. Dice que hay unos 2.500 en toda Cataluña, entre 250 y 270 en el Barcelonès y unos 180 en Barcelona ciudad. Militar en AC cuesta 20 euros al mes. «Es el partido más caro». Y para conseguir la afiliación se necesita el aval final de un miembro del comité de gobierno. «No solo es para que no se nos cuele nadie, que también, sino para no perder ninguna oportunidad de talento».
No demanaré permís ni perdó per ser islamòfoba.
— Sílvia Orriols (@orriolsderipoll) March 10, 2025
Potser els que haureu de demanar perdó a les futures generacions sou els qui heu tractat l’islam com una mera religió i no com una ideologia política totalitària, misògina, homòfoba i retrògrada.#SalvemCatalunya
Amela no cree que Aliança Catalana sea un partido de ultraderecha, a pesar de que Orriols propuso prohibir el velo islámico, ha dicho que empadronar a los inmigrantes ilegales no debería ser una obligación sino un delito y que es «islamófoba». «No nos consideramos [de ultraderecha]. Por hablar de inmigración nos dicen que somos extrema derecha», apunta el dirigente de AC. Sobre esta cuestión, también se refirió Orriols en una entrevista en El Món poco antes de las elecciones catalanas de mayo de 2024. «Me preocupa esta banalización del término y esta frivolidad, esta ligereza con la que se etiquetan las personas que ideológicamente pueden pensar diferente. Creo que todo el mundo tiene derecho a decir lo que piensa, a pensar como piensa. Hay que combatir las ideas con otras ideas y con otros argumentos. Y no con este tipo de etiquetas, banalizando regímenes totalitarios que a lo largo de la historia han hecho daño a mucha gente».
Tres detenidos por destrozos y lesiones en un acto de AC
Aliança Catalana planta regularmente puestos en diferentes puntos de Barcelona para dar a conocer su programa. Este fin de semana se ha realizado uno en la plaza de Catalunya. Amela se muestra crítico con el alcalde Jaume Collboni porque les pone «muchos problemas con los permisos». «Nos los dan con muy poco tiempo». Normalmente, cualquier acto de Aliança Catalana supone activar un dispositivo de los Mossos d’Esquadra. El pasado enero, en la plaza de Comas, en les Corts, se produjeron destrozos en una carpa y un militante fue agredido. En marzo, la policía catalana detuvo a tres personas vinculadas con la izquierda independentista por daños materiales, robo de material, coacciones y lesiones leves.
🌆 #Barcelona capital de #Catalunya i capital del Canvi!
— Aliança Catalana Barcelona (@Barcelona_ACat) November 30, 2025
🙏🏻 Infinitament agraïts a tots els que ahir ens vau venir a veure!#SalvemBarcelona amb @CatalunyaAC 💙 pic.twitter.com/nD9iFCEVfV
