El vecindario de Torre Baró puede apuntarse otra victoria. El Ayuntamiento y Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) han terminado asumiendo que el autobús a demanda no funciona en la zona sur del barrio y lo sustituirá por un autobús de línea regular. «La orografía de la zona y los problemas de cobertura hacen que el servicio no se ajuste a las necesidades expresadas últimamente por el vecindario», admiten desde TMB. Fuentes de la empresa han confirmado al Tot Barcelona que la línea de autobús regular se instaurará durante este verano -en el barrio apuntan a mediados o finales de julio- y tendrá una frecuencia de paso de 35 minutos. Desde TMB señalan que «próximamente» se definirá el recorrido, las paradas y los horarios.
El Ayuntamiento y TMB dan así marcha atrás en una de las grandes apuestas de movilidad en la zona. Horas después de la movilización vecinal del 21 de mayo, que reunió a un centenar de afectados frente a la sede del distrito, la operadora del servicio apuntaba que la idea inicial era explorar cómo iban las mejoras propuestas antes de tomar decisiones drásticas, pero finalmente ha acabado por certificar el cambio. «Hemos conseguido lo que buscábamos: tener un autobús con un horario fijo, que la gente mayor de nuestro barrio lo pueda tomar y que los niños puedan volver a casa sin tantos problemas», señala feliz la presidenta de la asociación vecinal, Valeria Ortiz.
Los vecinos que salieron a la calle como último recurso para presionar al distrito, a quienes pedían una medicación para conseguir deshacer el bus a demanda del sur. Antes del cambio, los vecinos tenían dos líneas regulares que tampoco funcionaban bien y el Ayuntamiento las reubicó, dejando la zona sin alternativas. TMB restaurará el servicio clásico al sur, pero mantendrá la apuesta al norte porque «los mismos vecinos de la zona norte valoran bien el servicio». El servicio también funciona sin quejas en Vallbona, Montbau y el Farró.

Esperanza de que sea un punto de inflexión
«Esperamos que sea un compromiso de trabajo para que todas las líneas de Torre Baró funcionen bien», apunta a este diario Ortiz. Los usuarios del servicio recuerdan que todavía hay que ajustar los cambios de la nueva aplicación del autobús a demanda, que ha entrado este mes en funcionamiento. También señalan que la línea 182 tiene demoras de 40 minutos cuando dos autobuses deben regular al mismo tiempo y que los autobuses del 183 se estropean habitualmente. «Esperamos que el acuerdo no sea un precedente para decir que ahora todo funciona bien, porque aún no es así. Hemos pedido un compromiso de que se seguirá analizando el servicio, nos han facilitado un contacto y nos volveremos a reunir», concluye Ortiz, que celebra, en todo caso, el entendimiento final con el Ayuntamiento y TMB.