El metro de Barcelona ha vivido una gran semana en cuanto a inversiones de cara al futuro. En los últimos días se han anunciado varias licitaciones millonarias que deben servir o bien para ampliar la red subterránea de la capital catalana o bien para mejorar la infraestructura ya existente, adaptándola a los nuevos tiempos y haciéndola más accesible para toda la ciudadanía. La principal iniciativa presentada esta semana es sin duda la de mayor envergadura: el proyecto para construir dos nuevas estaciones de la línea L9. En concreto, se trata de las paradas de Manuel Girona y Campus Nord, que prolongarán el tramo central de la línea desde Zona Universitària.
La licitación salió este jueves por un precio de 51 millones de euros y contempla los trabajos de obra civil y de estructura interior de las nuevas paradas proyectadas. En este sentido, incluye las obras para excavar los pozos de las estaciones —en el caso de Manuel Girona, completamente, y en el de Campus Nord, solo una parte—, las galerías de conexión con el túnel y la ejecución de la estructura interna de la estación. La primera de estas paradas estará ubicada en la calle Doctor Ferran, a la altura de la calle de Manuel Girona. Primero habrá una fase de implantación y desvío de servicios y después se ejecutarán las pantallas y la excavación del pozo, de 27 metros de diámetro y 60 de profundidad, el resto de infraestructuras de la estación y su estructura interior.
En cuanto a la segunda, estará situada en la intersección entre las calles John Maynard Keynes e Ignasi de Solà-Morales y Rubió. También se deberán ejecutar las pantallas y excavar los primeros 33 metros del pozo de la estación. La obra licitada también incluye la excavación de los 22 metros restantes del pozo, así como la galería que conectará con el túnel de la L9 y el resto de trabajos para completar la obra civil y la estructura interior de la estación.
Segunda fase en la adaptación de la estación de Verdaguer
La otra iniciativa licitada esta misma semana ha sido la adjudicación por parte del Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica de la redacción del proyecto para adaptar la estación de la L5 de Verdaguer a las personas con movilidad reducida. Esta actuación corresponde a la segunda fase de la mejora del intercambiador de Verdaguer y el proyecto tiene un importe de 400.000 euros. El plazo de ejecución es de 12 meses y se calcula que las obras costarán unos 19 millones y que se realizarán en dos fases para garantizar la operatividad de cada línea. La inversión total prevista para adaptar el intercambiador es de más de 27 millones de euros. Cabe recordar que actualmente están adaptadas 154 de las 163 estaciones de la red del metro.
