Todo listo para la operación salida de Semana Santa. El Servei Català de Trànsit (SCT) prevé que 560.000 coches salgan del área metropolitana de Barcelona, de los cuales 390.000 lo harán el jueves y 170.000 el viernes por la mañana. La movilidad será similar a la de otros años y Trànsit prevé habilitar dos carriles adicionales en la AP-7 este mismo jueves para facilitar la salida de los coches. Uno se habilitará en el tramo entre Montornès del Vallès (Vallès Oriental) y Sils (Selva) y otro entre Martorell (Baix Llobregat) y Banyeres del Penedès (Baix Penedès). En los carriles adicionales, la velocidad máxima será de 100 km/h en ambos sentidos para los coches y de 80 km/h para los camiones, que deberán circular obligatoriamente por la derecha. Los Mossos d’Esquadra también han previsto un dispositivo especial de 1.670 agentes que realizarán 1.228 controles entre el jueves y el lunes.
Trànsit prevé que la operación salida de Semana Santa comience a las 8.00 del jueves y termine a las 15.00 del viernes. La hora punta de salidas se calcula que será este jueves hacia las 13.00, por lo que los carriles adicionales en la AP-7 se abrirán a las 11.00 o a las 12.00. Según el director del SCT, Ramon Lamiel, el dispositivo es similar al del año pasado porque funcionó “bastante bien”. Además de los carriles adicionales, Trànsit instalará transferencias basculantes en la AP-7 entre Sant Celoni y Llinars del Vallès (Vallès Oriental) y en Vilafranca (Alt Penedès) para poder abrir y cerrar carriles en función del tráfico en cada momento. En la B-23/AP-7 de Barcelona a Martorell la velocidad máxima permitida será de 80 km/h y habrá restricciones a la circulación de camiones hasta que finalice la operación salida.

Las previsiones de Trànsit es que la movilidad de esta Semana Santa quede bastante repartida entre destinos de playa y de montaña. La AP-7 será la vía que concentrará más desplazamientos y, por tanto, donde hay más posibilidades de retenciones. El SCT también avisa que puede haber tráfico denso y retenciones en la A-2, la A-7 o la C-32. Para facilitar la fluidez de la circulación, estos días se detendrán las obras que están en marcha en la C-16 en Terrassa, C-17 en Lliçà de Vall, C-25 en Sant Sadurní d’Osormort y C-35 en Sant Celoni, entre otras.
La operación retorno, lista
En cuanto a la operación retorno, Trànsit prevé que comenzará a las 12.00 del domingo y se prolongará hasta la medianoche del lunes. Se estima que unos 580.000 coches volverán al área de Barcelona después de la Semana Santa. Las franjas en las que se prevén más retenciones son el domingo de 16.30 a 22.30 y el lunes de 11.30 a 22.30. Para facilitar el regreso, Trànsit habilitará tres carriles adicionales en la AP-7 y la C-32 norte. Concretamente, estarán en la AP-7 sur/B-23 entre Vilafranca y Molins de Rei, en la AP-7 norte entre Sant Celoni, Llinars del Vallès y Montornès y en la C-32 norte/B-20 entre Sant Andreu de Llavaneres y Montgat. La velocidad máxima también estará limitada a 100 km/h para los coches y a 80 km/h para los camiones, que deberán circular por la derecha. Durante toda la operación retorno también habrá restricciones a la circulación de vehículos pesados.
Objetivo: cero muertes en la carretera
Lamiel ha destacado que el objetivo del dispositivo especial de Semana Santa es que no haya muertes en las carreteras catalanas, como ya ocurrió el año pasado. Desde Trànsit hacen un llamado a una “conducción responsable” y han pedido poner “especial atención” en los colectivos más vulnerables, sobre todo los motoristas y los ciclistas, porque se prevé que habrá mucha movilidad en las carreteras secundarias, donde los coches y los camiones comparten vía con las motos y las bicis. Trànsit colocará radares en los puntos más conflictivos y tendrá tres helicópteros sobrevolando las carreteras para hacer seguimiento del dispositivo y actualizar la información del tráfico.