Este fin de semana vuelve a ser puente en Barcelona y el Servicio Catalán de Tráfico prevé que unos 500.000 vehículos salgan del área metropolitana de Barcelona entre viernes por la tarde y sábado por la mañana por la segunda Pascua. El dispositivo especial de tráfico se alargará de las 15.00 horas de este viernes y la medianoche del lunes, que es festivo además de un centenar de municipios catalanes. La previsión de retorno de lunes es que unos 300.000 vehículos vuelvan entre las doce del mediodía y la medianoche. Un total de 1.516 agentes de los Mossos d’Esquadra velarán por la seguridad durante estos tres días y se harán 1.222 controles.
Las principales afectaciones viarias de esta nueva operación salida se esperan durante toda la tarde del viernes, más concretamente entre las dos del mediodía y las nueve de la noche, y parte de la mañana del sábado, entre las 10 de la mañana y las dos de mediodía. En cuanto a la operación vuelta, la previsión es que las complicaciones se den entre las cuatro y media y de la tarde y las nueve de la noche.
Vías más afectadas
En cuanto a las vías, las más afectadas de salida serían la AP-7 entre Sant Cugat y la Roca del Vallès y entre el Papiol/Catellbisbal y Gelida. De vuelta, la previsión es a la misma vía entre Llinars y la Roca del Vallès, de la Jonquera al Voló y entre el Vendrell y Vilafranca del Penedès y en Gelida. Además, habrá circulación densa a las vías de acceso a localidades costeras como la N-340 en el Vendrell, Roda de Berà y Altafulla, la N-II a Tordera; y a la Costa Brava a la C-31 en Santa Cristina d’Aro y a la C-56 a Llagostera. También pueden haber retenciones a la C-58 y a la C-33 en Moncada y a la B-23 al Papiol.
Aparte del medio millón de coches que habrá a las carreteras catalanas, Tráfico también alertado que habrá diferentes tramos afectados por obras que puede dificultar la circulación. Algunas de estas vías afectadas son la C-16 en Terrassa, la C-17 al tramo Parets del Vallès-Granollers-Canovelles, la C-245 en Sant Boi de Llobregat, la C-55 a Manresa, la C-59 en Sant Feliu de Codines y la C-25 en Sant Sadurní d’Osormort, a la demarcación de Barcelona. A la de Lleida la C-14 en el Coll de Nargó y a la de Tarragona la N-240 en Montblanc.
Herramientas para mejorar el tráfico
Para intentar reducir las congestiones y mejorar la fluidez del tráfico en todo Cataluña, se habilitarán varios carriles adicionales en sentido contrario al habitual a la AP-7 entre Montornès del Vallès y Sils y entre Martorell y el Vendrell sábado. También a la AP-7/B-23 entre Vilafranca y Molins de Rei y entre Sant Celoni y Montornès del Vallès el lunes. En estos tramos de la AP-7 donde habrá carril adicional en sentido contrario se limitará la velocidad a 100 kilómetros por hora en ambos sentidos. Además, los vehículos que circulan en el carril en sentido contrario lo tienen que hacer a 80 kilómetros por hora, así como los camiones en las franjas horarias permitidas.
