Las obras que se están llevando a cabo en la Rambla, que en este mandato han llegado a la altura del Gran Teatre del Liceu, provocan goteras en la estación de metro de la línea 3. A diferencia de otras estaciones más modernas, los andenes de esta parada están cerca de la calle y las lluvias terminan penetrando cuando son intensas. En estas situaciones, los charcos de agua en la vía son importantes, sobre todo al lado de la instalación más próxima a la salida del teatro. Sin embargo, los trenes circulan igualmente con normalidad.
Fuentes municipales consultadas por este diario hablan de filtraciones “temporales y debido a las últimas lluvias” y concretan que las tareas de impermeabilización «de la losa superior de la estación» han comenzado este último miércoles. Desde el ejecutivo defienden que esta impermeabilización «es una actuación prevista en todos los procesos de transformación de la vía pública» y que se trata de una actuación “conocida, informada y coordinada” con Transports Metropolitans de Barcelona (TMB). Desde la operadora se limitan a decir que las goteras «no afectan el servicio» y que solo se producen cuando «hay lluvias muy intensas», sin hacer ninguna mención al origen de las filtraciones a pesar de tener constancia. Sí que matizan, en todo caso, que se ha trabajado las últimas semanas para encontrar una «solución técnica».
Trabajadores de la misma estación han concretado a este diario que las goteras llevan meses y que afectan sobre todo la zona de las vías. En todo caso, matizan, también hay días en que las filtraciones llegan a los andenes. El agua, apuntan, ha obligado incluso a cerrar momentos puntuales la estación. Los responsables del recinto han instalado luces LED en el andén donde se detienen los trenes que van en dirección a Trinitat Nova porque el agua “hacía saltar la luz de toda la estación”.
Las obras de la Rambla se han acelerado con la llegada de Jaume Collboni, que ha reducido de cinco a tres las fases de ejecución. Hasta junio se actuó en la acera lateral del lado Gótico y este verano la maquinaria se ha trasladado al otro eje de la vía. El ejecutivo trabaja con la idea de tener la calzada del Raval reformada en abril de 2026. La próxima y última fase, la del paseo central, durará un año aproximadamente.
Filtraciones también en la L2
Las filtraciones de agua en Liceu no son aisladas. Últimamente, ha habido diferentes incidencias provocadas por obras públicas en la vía. A finales de octubre, una filtración dejó sin servicio la línea 2 del metro entre las estaciones de la Sagrada Familia y la Pau. La incidencia se produjo entre Encants y el Clot y paralizó la línea gran parte de la tarde y noche del 28 de octubre. Todo coincidió con una huelga de autobuses, lo que dificultó la movilidad general.
