Las obras de la nueva estación de Gràcia de los Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya provocarán importantes afectaciones en la movilidad del barrio. Según ha informado este mismo sábado el Ayuntamiento, la construcción del nuevo espacio conllevará, entre otros efectos sobre la circulación, un corte en la Travessera de Gràcia, entre Via Augusta y la Calle de Sant Gabriel. En otro tramo de la misma vía, entre Gran de Gràcia y Sant Gabriel, se invertirá el sentido de la circulación.
Los vecinos de la zona comenzarán a notar los efectos de las obras a partir de la noche del lunes 17 al martes 18 de marzo. Desde entonces, la entrada a la calle de Sant Gabriel se producirá desde la calle Gran de Gràcia, mientras que se podrá salir en dirección hacia la calle Santa Eugènia. Los cortes también afectarán tramos de la calle de Neptú y de la Riera de San Miquel. Entre Lluís Antúnez y la travesera, este tramo permanecerá en callejón sin salida, y solo podrán entrar los vecinos y los vehículos de emergencia. Además, a partir del mismo lunes, se reubicará el espacio de juegos infantiles de la plaza Gal·la Placídia al lado montaña, que no estará afectado por las obras.
Cortes para los autobuses
Los cortes en la circulación en Gràcia también tendrán efectos sobre diversas líneas de autobús que transitan la zona. En concreto, las líneas 87 y 114 sufrirán cambios en su recorrido para adaptarse al nuevo trazado. En el primer caso, la 87 mantendrá las paradas en Gal·la Placídia y Fontana, aunque se desviará entre Riera de Cassoles y Gran de Gràcia, donde recuperará su recorrido normal. Las paradas de travessera de Gràcia y Gran de Gràcia se sustituirán por otras en Via Augusta y rambla del Prat, respectivamente. La 114, a su vez, reducirá su recorrido para no chocar con las obras. Ya no llegará hasta Via Augusta, y se desviará a Gran de Gràcia para recuperar su itinerario original. Mantendrá, sin embargo, las paradas de Ros de Olano.
