Las obras de mantenimiento del funicular de Montjuïc han levantado polvo un año más. Los trabajos de revisión y puesta a punto de la infraestructura la dejarán inoperativa durante casi un mes entero, ya que no podrá reanudar el servicio al menos hasta el próximo 3 de marzo. Eso si no hay contratiempos que retrasen las tareas. La situación afecta a los vecinos del barrio del Poble-sec, pero especialmente a las familias de los dos centros educativos que se encuentran en esta parte de la montaña barcelonesa, que se quedan sin uno de los transportes más utilizados para poder acceder a los equipamientos.
Se trata de la Escola Municipal Tres Pins y de la Escola Bosc de Montjuïc, dos centros separados por menos de 500 metros y que se encuentran muy próximos a la estación Parc de Montjuïc, la segunda y última parada del recorrido, que conecta la avenida del Paral·lel con la avenida de Miramar salvando un desnivel de 80 metros sobre el nivel del mar. «Hace unos años que pedimos que este mantenimiento se haga en verano y no en pleno curso escolar. Muchas familias utilizan el funicular para ir cada día a la escuela. Para un servicio que tenemos en el barrio…», señala Josep Maria Mateos, miembro de la Asociación de Familias de Alumnos de la Escola Tres Pins.
Las peticiones que las comunidades educativas han hecho llegar al Ayuntamiento de Barcelona desde hace casi una década no han surtido el efecto deseado. De hecho, según denuncian, la respuesta siempre ha sido la misma: que Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) «lo hace así» y no se puede hacer nada. Los afectados consideran que, por el volumen de personas que utilizan este funicular, tendría más sentido hacerlo en julio o agosto, cuando solo lo usan algunos grupos de turistas, pero un momento en el que la parada no tendría un efecto en el día a día de los centros educativos, que son los principales usuarios si no contamos a los aficionados que lo están usando puntualmente para ir a los partidos del FC Barcelona en el Estadio Olímpico Lluís Companys.
Las alternativas sobre la mesa
Como alternativa mientras se prolonguen estos trabajos, los afectados tienen algunas opciones sobre la mesa. Pueden ir a pie, ir a buscar la línea de autobús 55 -que conecta la estación de Urquinaona con esta parte de la montaña de Montjuïc subiendo por la calle de Lleida- o bien utilizar el autobús lanzadera que habilita TMB de manera extraordinaria mientras se prolonguen los trabajos. Sobre el papel, este servicio funciona con el mismo horario que la infraestructura: de lunes a viernes, de las siete y media de la mañana a las ocho de la tarde, y sábados, domingos y festivos, de nueve de la mañana a ocho de la tarde.
En el comunicado donde anunciaba el inicio de los trabajos de mantenimiento del funicular, el operador aseguraba que las diferentes paradas del recorrido del autobús lanzadera estarán debidamente señalizadas y habrá personal que informará a los usuarios de la ubicación de estas. Esta mejora de la señalización es precisamente otra de las observaciones que hacen a la administración las comunidades educativas, que alertan que hay mucha gente que tiene dificultades para localizar la entrada de la estación ubicada en el metro de Paral·lel (líneas L2 y L3).
