El Ministerio de Transportes ha anunciado, en un comunicado, que movilizará más de 60 millones de euros en cinco nuevos contratos que reforzarán el servicio ferroviario catalán en el marco del llamado Plan Rodalies. Inversiones que tienen que servir para mejorar algunas estaciones catalanas, impulsar otraas nuevas y enfriar, en definitiva, la inquietud que tienen los usuarios del servicio en Cataluña. Este plan dejará a Barcelona prácticamente la mitad del presupuesto, que se destinará a las dos infraestructuras más importantes que proyecta Adif en la capital catalana.
El paquete más grande, dotado con 22,7 millones de euros, se destinará a la renovación de la estación de Barcelona-Sants, la más grande de la ciudad. La idea del gobierno español es sustituir elementos de una parte exterior de la cubierta del edificio de viajeros, reforzar la impermeabilización de la losa que hay sobre los andenes, cambiar el pavimento e impulsar el despliegue de nuevos sistemas de evacuación de aguas pluviales. Para esta última mejora, el Estado tiene previsto instalar colectores en la estación.

La otra partida económica que aterrizará en Barcelona tiene que servir para acelerar las obras de la futura estación de la Sagrera. Según dice el ministerio, se destinará una inversión próxima a los 6 millones de euros para impulsar los trabajos en la zona logística de la Sagrera y para instalar la Zona de Tratamiento Técnico de Trenes (ZTTT), destinado al estacionamiento y explotación comercial de servicios de alta velocidad.
Inversiones en el área metropolitana y el Vallès
El ministerio liderado por Raquel Sánchez, que en mayo fue reprobada en el Congreso por el caos de Rodalies, también tiene previsto mejorar la capacidad de la línea R3, que conecta l’Hospitalet de Llobregat y Puigcerdà. Se destinarán cerca de 20 millones de euros a la nueva estación de Partes del Vallès y 5,5 millones más para mejoras en la accesibilidad de las estaciones de Granollers-Canovelles, les Franqueses del Vallès y la Garriga. Los últimos 6,9 millones de este paquete servirán para eliminar dos pasos de nivel en la Canonja. Anteriormente, se han adjudicado las obras del soterramiento de la R2 en Montcada i Reixac y la remodelación de la estación de Moncada Bifurcació.