El Ayuntamiento de Barcelona culminará este fin de semana la erradicación de los giros obligatorios que hasta ahora afectaban la avenida Diagonal. Los trabajos para eliminar esta medida -uno de los cambios en la movilidad impulsados por una concejalía del PSC bajo el mandato de Ada Colau que más polvareda levantaron- arrancaron ahora hace justo una semana con la retirada de las señalizaciones ubicadas en uno de los laterales de la Gran Vía de las Cortes Catalanas, la otra gran arteria de la capital catalana donde se había impulsado.

Si el fin de semana pasado se actuó en muchos de los cruces verticales del lado mar de la Gran Vía, este sábado 3 de febrero ha sido el turno de los cruces de la avenida Diagonal con la Vía Augusta y las calles de Aribau, Muntaner y de Roger de Llúria. A partir de ahora, los vehículos ya no se verán obligados a girar en estos cruces, sino que podrán mantener su rumbo y continuar recto si así lo desean.

Hay que recordar, sin embargo, que estos trabajos no implican retirar todas las señales de obligación de giro, que se mantendrán todavía en tres puntos de la ciudad: en el lateral mar de la avenida Diagonal hacia el paseo de Gracia, con el objetivo de garantizar la seguridad viaria en un punto de más complejidad viaria; en el lateral mar de la avenida Diagonal hacia la calle de Pau Claris, para reducir la aportación del tráfico a la zona de obras del tranvía; y en el lateral mar de la Gran Vía hacia Bailén, dado que el lateral mar finaliza en este punto por la configuración de la plaza de Tetuán.

Oportunidad para completar un peligroso tramo de carril bici

Una de las incógnitas que ha generado la eliminación de estos giros obligatorios es si el consistorio apostará ahora por acabar el carril bici que discurre por el lateral del costado montaña de la Diagonal, que está incompleto a su paso por la calle de Roger de Llúria. En concreto, el tramo de la discordia es el que va entre esta calle y la plaza del Cinc d’Oros, donde el colectivo de ciclistas ha denunciado en múltiples ocasiones los adelantamientos temerarios que tienen que sufrir por parte de los vehículos que quieren circular por el lateral.

Nou comentari

Comparteix

Icona de pantalla completa