La T-Mobilitat ha desembarcado definitivamente para quedarse. Desde este mismo martes ya se pueden comprar la mayoría de títulos del transporte público solo con este formato -con una tarjeta de cartón sin contacto y recargable– en buena parte de las máquinas de autoventa de la red.
Según la información facilitada por la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), la previsión es que estas máquinas dejen progresivamente de imprimir los billetes antiguos con banda magnética que se utilizaban hasta ahora para los abonos de la T-casual, la T-usual, la T-grup y la T-familiar. A partir de ahora, los títulos solo se venderán en el formato específico de la T-movilidad de cartón, un sistema que no requerirá registro previo y costará medio euro, que se pagará una sola vez. Una vez la persona agote el título que compre la primera vez, podrá recargar esta misma tarjeta en cualquier máquina o a través de su móvil. El nuevo formato, que es anónimo y no está vinculado a los datos de la persona que lo compra, permitirá la recarga únicamente de un título al mismo tiempo, es decir, no podrá contener diferentes abonos a la vez.
Un mes y medio para gastar los abonos antiguos
Este cambio de modelo puede plantear en los usuarios varias dudas como por ejemplo hasta cuando se podrán utilizar los títulos antiguos con banda magnética ya comprados o que se adquieran en estos últimos días. Las autoridades han informado en este sentido que estos abonos se podrán continuar utilizando hasta que se agoten o bien hasta su data caducidad, que está fijada para el próximo 15 de enero, dado que las máquinas de validación todavía admitirán este tipo de billetes. Esto supone que los usuarios con estos billetes tienen poco más de un mes y medio para gastar estos títulos y pasarse al nuevo modelo de tarjeta de cartón de la T-Mobilitat.