El cruce de la calle de Tuset con la Travessera de Gràcia, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, es caótico y peligroso. Los peatones cruzan por donde quieren, hace unos años que se habilitó un carril bus en dirección contraria que es un riesgo y las indisciplinas viarias son demasiado habituales. Ahora, el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido reordenar la zona. El proyecto costará 403.467,88 euros y la ejecución durará cuatro meses. Fuentes municipales explican al TOT Barcelona que el inicio de obras aproximado será durante el último trimestre de 2024, con la idea de acabar entre enero y marzo de 2025.
Este jueves por la mañana, este medio ha podido comprobar los riesgos viarios. En un cuarto de hora, una decena de personas han cruzado la travesera por donde no tocaba. Lo cierto es que, actualmente, solo hay un paso de peatones en el lado Llobregat y hace falta otro en el lado Besòs. El carril bus en dirección contraria tampoco ayuda. En todo el tramo de este carril, que va de la calle de Balmes a la de Calvet en sentido Llobregat, se han producido demasiadas veces atropellos y otros accidentes. Y los vehículos que giran desde la travesera hacia la calle de Alfonso XII no siempre hacen la parada necesaria para evitar poner en riesgo a las personas que pasan por la acera, especialmente en horas punta y durante la entrada y salida de las escuelas.
Accidentes en el carril bus en dirección contraria
En 2022, el grupo municipal de Junts denunció que en cuatro años, desde 2018, el carril bus acumulaba 117 accidentes, algunos de los cuales tuvieron lugar en la travesera con Tuset. Según explicó entonces el regidor Jordi Martí Galbis, 17 de los siniestros fueron atropellos y en 22 se vieron involucrados buses de TMB. Presidente del distrito de Sarriá-Sant Gervasi, Martí Galbis dice que su partido hace años que denuncia los riesgos viarios y opina que el gobierno quiere aprovechar el malestar que hay por el ruido de las discotecas de Tuset para hacer la reforma. Según Trias por Barcelona, el gobierno de Jaume Collboni no ha informado de este proyecto ni en el consejo de barrio ni en las comisiones consultivas previas al pleno que se hizo el miércoles 13 de marzo.
Según el consistorio, la «necesidad» de reordenar el cruce se ha hecho evidente por el uso indebido que se hace de los chaflanes, «fundamentalmente con carga y descarga irregular». También se ha detectado que hay que habilitar un paso de peatones en la travesera que dé continuidad a los recorridos que se generan entre Travessera de Gràcia y Tuset, una calle pacificada, y evitar que la ciudadanía pase la calle por donde toca.
Reubicación de aparcamientos y contenedores
Así, el proyecto implica instalar el citado paso de peatones, que será con semáforos, desde la acera del lado Besòs, para mejorar la accesibilidad y disminuir la indisciplina de los vehículos. La superficie sobre la que se actuará será de más de 1.700 metros cuadrados. Además, la reordenación prevé reubicar el actual paso de peatones del lado Llobregat, ajustar las alineaciones de las aceras de travesera, agrandar los chaflanes y reubicar el aparcamiento de bicicletas, la parada de taxis y los contenedores de esta zona, así como la terraza del lado Llobregat-mar y del quiosco del lado Besòs, subrayan fuentes municipales. Por su parte, la zona de estacionamiento para motos, esta quedará repartida en las nuevas alienaciones que se crearán con la ampliación del chaflán.
