El gobierno de Jaume Collboni ha vuelto a rechazar la denuncia del PP contra la reforma de la ronda de Sant Antoni, que se aprobó con Ada Colau como alcaldesa y el alcalde socialista ha seguido adelante a pesar de haber prometido durante la campaña electoral que no la llevaría a cabo. En concreto, la comisión de gobierno del pasado 19 de diciembre desestima el recurso potestativo de reposición interpuesto por el presidente de los populares en el Ayuntamiento Daniel Sirera contra las obras de pacificación, recoge el punto 34 de los acuerdos [ver aquí].
Tal como avanzó a finales de 2023 el TOT Barcelona, Sirera presentó una Acción Pública Urbanística, un procedimiento administrativo -pero que también puede hacerse por la vía judicial- que tenía por objeto impugnar las obras para garantizar la defensa de la legalidad. Básicamente, la fundamentación del PP se basaba en el hecho de que la reforma se había impulsado sin llevar a cabo la necesaria modificación del Plan General Metropolitano (PGM), tal como han señalado varias sentencias judiciales sobre las reformas de ejes verdes del Eixample, como la de Consell de Cent, al tratarse de una calle que es considerada red viaria. En el caso de la ronda de Sant Antoni, la situación sería aún más clara, ya que es una calle que el PGM define como red viaria básica y, por tanto, no se puede cerrar al tráfico, explicó el arquitecto y urbanista Antoni Renalias al TOT Barcelona.

En mayo, la denuncia no se admitió a trámite
El 9 de mayo pasado, la misma comisión de gobierno ya inadmitió a trámite «la solicitud de revisión de oficio del acto de aprobación del proyecto de obras ordinarias de la ronda Sant Antoni entre la calle del Comte d’Urgell y la calle de Floridablanca, y de la calle Tamarit, entre la calle del Comte d’Urgell y la ronda de Sant Antoni», presentada por el PP. Según el texto consultado por este medio, ahora el recurso de Sirera se rechaza «al apreciar su falta de fundamentación y considerando que la resolución impugnada se ajusta al ordenamiento jurídico, de acuerdo con el informe de la dirección de servicios de asesoramiento jurídico del 16 de diciembre de 2024».
En declaraciones al TOT Barcelona, Sirera asegura que con su denuncia han conseguido que el gobierno de Collboni modifique el proyecto de acuerdo con las demandas de los vecinos (una parte de ellos, la otra quería una pacificación total de la calle), después de que el alcalde les «engañara» durante la campaña electoral. «Ahora, los vecinos del tramo superior de la ronda de Sant Antoni podrán acceder a sus domicilios en servicio público y en vehículo privado, facilitando el desplazamiento a personas con problemas de movilidad». Los populares también afirman que el tramo de la calle del Comte d’Urgell por donde antes circulaban los buses para incorporarse a Manso es ahora, por la presión que han ejercido, una zona de aparcamiento de motos y bicicletas, «descongestionando las aceras». De momento, Sirera no abrirá la vía judicial del caso.
En junio, el gobierno rectificó el proyecto
La reforma de la ronda de Sant Antoni se inició hace un año. Si no se producen retrasos, los trabajos deberían terminarse hacia junio de este año. Con un presupuesto de 11,6 millones, hace medio año el gobierno de Collboni rectificó y anunció que introducía cambios en la reforma de la ronda de Sant Antoni y permitiría el paso de vehículos privados -de vecinos, pero con toda la ambigüedad de la palabra, porque el Ayuntamiento no ha explicado cómo diferenciará los vehículos de los residentes del resto-, desde la plaza del Pes de la Palla en dirección a la calle de Comte d’Urgell. También se permite el paso del bus desde Villarroel hasta Comte d’Urgell, como ya estaba previsto. Ahora, las obras que están ejecutando son las de la calle de Tamarit, para conectar así la nueva ronda con la superilla de Sant Antoni, y la plaza del Pes de la Palla, que se reformará para mejorar el espacio público e incluir una nueva área de juego infantil.




