Montjuic vivirá su primera gran prueba de fuego del año. La Liga ha situado el partido Barça – Sevilla para el viernes 29 de septiembre a las 21 horas, la misma hora en que Joaquín Sabina subirá al escenario del Palacio Sant Jordi. El concierto acogerá 15.000 personas y se espera que unas 40.000 más estén presentes en el estadio olímpico para disfrutar del fútbol.
Era cuestión de tiempo que uno partido del Barça coincidiera con otro gran acontecimiento, pero no por eso ha dejado de despertar cierta preocupación entre las partes implicadas. Tito Ramoneda, productor del concierto, ha lamentado la coincidencia y ha pedido a la Liga que cambie la fecha. «El concierto es inamovible, sería una falta de respeto que un acontecimiento anunciado desde hace un año y vendido hace meses se cambiara porque la Liga ha decidido que el Barça juegue en la misma hora en el estadio olímpico», ha comentado en declaraciones a RAC1.
En esta misma entrevista, el portavoz de la productora ‘The Project’ se ha mostrado sorprendido con la «unilateralidad» de la Liga y ha insistido que el partido del Barça podría jugarse en otro horario. En el otro extremo se defienden remarcando que ambos clubes tienen partido de Champions entre semana y que el enfrentamiento de liga no se puede jugar el domingo. Tampoco el sábado es una opción mejor porque por la noche hay otro concierto, en este caso, de Hombres G. Unas explicaciones que, en todo caso, no convencen a Ramoneda porque si el partido se juega sábado a primera hora –en el horario de las 16h– «hay margen».
Incógnitas con la movilidad
La otra incógnita sobre la mesa está en como accederán los fans de Sabina al Palau Sant Jordi, teniendo en cuenta que el Plan de Movilidad de los partidos del Barça impide a los coches acceder en la montaña olímpica. «El público de Sabina está acostumbrado a ir en coche», ha comentado Ramoneda en la radio poco antes de preguntarse qué hará el Ayuntamiento. David Escudé, regidor de deportes, ha remarcado que la ciudad y el operativo «están preparados».
