Alquilar un piso en Barcelona es toda una odisea. Tanto por el precio desorbitado como por la oferta de pisos en el mercado, cada vez más incapaz de absorber la gran demanda. Según el portal inmobiliario Idealista, la capital de Cataluña es la ciudad número 21 en el ranking de las ciudades del estado con más demanda de pisos de alquiler, a un precio medio de 1.741 euros. Curiosamente, Madrid ocupa el lugar 33 del ranking, y dos ciudades catalanas entran en el TOP 5 de todo el Estado.
Es el caso de l’Hospitalet de Llobregat, conectada en pocos minutos por metro, bus, Tram y ferrocarriles de la Generalitat y también Renfe con Barcelona. Y con una conexión también directa por carretera. Según los datos de Idealista, es la tercera ciudad con más demanda de alquiler, donde el precio medio ya se eleva hasta los 1.211 euros para el alquiler de un piso de características estándar. Y fuera de la primera corona, pero también muy bien conectada con la capital por coche, Renfe y FGC, Terrassa (Vallès Occidental) ocupa la cuarta posición de todo el Estado en cuanto a demanda de vivienda para vivir en alquiler. Aquí el precio medio es mucho más bajo que en Barcelona y también que en l’Hospitalet, situándose en 924 euros.
Estas dos ciudades comparten primeras posiciones con ciudades como Getafe (5), Fuenlabrada (6), Torrejón de Ardoz (7), Alcalá de Henares (8), Alcorcón (12) y Alcobendas (13). Y también las dos ciudades con más demanda de alquiler son madrileñas. Se trata de Leganés y Móstoles.

Los alquileres se abaratan un 8% en Barcelona
Según el Gobierno de la Generalitat, el tope en los precios del alquiler ha comportado un descenso de entre el 8% y el 9% del precio del arrendamiento, y en el conjunto de Cataluña ha bajado casi un 5% el primer trimestre de este 2025 respecto al mismo período del año pasado. Los precios registrados oficialmente se situaron durante el primer trimestre en los 828 euros de media en Cataluña y los 1.087 euros en la capital. A pesar de eso, los datos que ha hecho públicas el Incasòl este martes también revelan que ha caído el número de contratos y se ha disparado un 52% el alquiler de temporada. Además, solo en el año 2021 se firmaron al menos 119.000 contratos en Cataluña de una duración de cinco años, de manera que caducan durante el 2026. Se calcula que más de una cuarta parte de estos -unos 32.500– son en Barcelona.


