El caso de Montse Aguilar podría terminar en tribunales. La familia de la trabajadora de limpieza que falleció después de sentirse mal durante su jornada laboral en plena ola de calor denunciará la muerte laboral si la autopsia judicial confirma que sufrió un golpe de calor. Así lo ha confirmado este miércoles en una rueda de prensa desde la sede de la CGT Clara Aguilar, hermana de Montse, quien ha precisado que dirigirán la demanda contra la subcontrata FCC y el Ayuntamiento de Barcelona. «Nos hemos sentido maltratados por parte del consistorio, que dio por buena la primera versión que dio la empresa. También la UGT dio información falsa exculpando a la compañía de una muerte por causa laboral […] Sentimos impotencia y rabia. No me la devolverán, pero al menos que no mientan», ha señalado la familiar visiblemente emocionada.
Por parte de la CGT, el delegado sindical de Prevención en el Ayuntamiento, Ramón San Blas, ha asegurado que constan al menos catorce resoluciones de inspección laboral desde 2019 en las que se exponen diferentes deficiencias relacionadas con las condiciones en las que deben desarrollar su actividad los trabajadores del servicio durante episodios de calor extremo. El representante ha enumerado algunas de las más recientes, que datan de los veranos de 2023 y 2024, donde se indica que hay problemas con el aire acondicionado de los vehículos, con la ropa que llevan los empleados o con la falta de acceso a agua durante el recorrido. «Las condiciones en las que trabajó Montse habían sido denunciadas en múltiples ocasiones y su muerte era totalmente evitable. Creemos que FCC podría haber incumplido de esta manera el contrato», ha apuntado San Blas, quien considera que el ejecutivo también tiene una parte de responsabilidad al tratarse de un servicio municipal en concesión.
El sindicato también ha informado que durante los últimos días han detectado un total de hasta ocho golpes de calor entre los trabajadores del servicio de limpieza que han derivado en algún tipo de asistencia médica y ha remarcado que estos casos demuestran que hay un claro problema con los protocolos de prevención de riesgos vigentes. «No nos sirve de nada tener un protocolo si este no se está aplicando», ha insistido San Blas. En este sentido, Aguilar ha explicado que su hermana se quejó durante su jornada a su supervisora de que le dolían las cervicales y la espalda, que tenía escalofríos en todo el cuerpo y que sentía una presión en el pecho. «Le dijo que se bebiera toda la botella de agua y que, si seguía sintiéndose mal, que se fuera a casa. Su obligación era avisar a una ambulancia y llevarla a un centro médico«, ha relatado. Cuando regresó a casa, justo después de cenar, Montse se desplomó y perdió la vida.
Cara a cara con Bonet en la comisión extraordinaria
Hay que recordar que Aguilar ya estuvo presente este martes en la comisión extraordinaria de Ecología, Urbanismo, Movilidad y Vivienda forzada por los grupos de la oposición con el objetivo de esclarecer las circunstancias de la muerte. Tras la sesión, la hermana de Montse se dirigió a la primera teniente de alcaldía y máxima responsable del área, Laia Bonet, y le mostró una de las prendas de ropa que llevan los empleados del servicio de limpieza, invitándola a tocarla para entender por qué hace tiempo que la plantilla pide cambiarlas por inadecuadas. De hecho, así lo reclamaban varios de los trabajadores afectados en este reportaje publicado hace justo una semana en TOT Barcelona, donde enumeraban otras deficiencias como la falta de aire acondicionado en los vehículos o la necesidad de comprarse los mismos empleados botellas de agua durante el recorrido.
La familiar de la trabajadora fallecida -que acudió a la sesión acompañada de varios representantes del sindicato de la CGT- ya se mostró entonces muy decepcionada por la posición del ejecutivo en la comisión, que despertó fuertes críticas por parte de los grupos de la oposición, y aseguró que ni la empresa FCC ni el Ayuntamiento le habían dado directamente el pésame.
