A los empresarios catalanes no les parece bien que Barcelona haya renunciado a organizar la próxima edición de la Copa América de vela. Así lo ha asegurado este jueves por la mañana el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, en unas declaraciones a la prensa. Durante su intervención, Sánchez Llibre ha asegurado que desde Foment «lucharán para que la competición se quede en la ciudad», ya que desde su punto de vista ha sido «todo un éxito». Además, el empresario ha lamentado que la versión del Ayuntamiento de Barcelona «cambiase en solo 48 horas», recordando que el teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, aseguró el pasado fin de semana que la competición «había sido un éxito» para la ciudad cuando dos días más tarde renunciaron al retorno de la «Fórmula 1 del mar» en el año 2026. Además, Sánchez Llibre ha recordado que fue Barcelona Global quien impulsó que la competición pudiera aterrizar en la ciudad.
Al mismo tiempo, el presidente de Foment ha insistido en el «éxito» de la Copa América y el «relanzamiento» que ha supuesto para la imagen de Barcelona a escala mundial. Por la parte más empresarial ha comentado que la competición ha posibilitado que la capital catalana se haya convertido en un ‘hub’ de economía azul. «Queremos que se quede en Barcelona», ha insistido el empresario y ha añadido que mantendrán una ofensiva en este sentido con el apoyo de otras entidades.
Los ganadores descartan Barcelona
Todo se hizo oficial el pasado día 22, cuando el equipo ganador de la competición, el Emirates New Zealand, aseguró en un comunicado en las redes sociales que descartaban la capital catalana por un problema de espacio. Concretamente, argumentaban que con las infraestructuras de la ciudad, la Copa América de vela no puede crecer. “Mantenemos la mente abierta sobre la mejor manera de lograr esto con una sede, o diferentes sedes, que puedan potenciar la 38ª Copa América con una mayor huella global, más equipos y mayores oportunidades de expansión general. Sería difícil ampliar el número de equipos en función del espacio de infraestructura disponible en Barcelona” sentenciaban
Por su parte, Valls aseguró menos de 24 horas más tarde que para Barcelona “no aporta nada alargarla hasta el 2026, hacer una inversión de recursos públicos y privados para alargar una apuesta cuando hemos conseguido los objetivos marcados en los últimos cuatro años”. En todo caso, el responsable económico del Gobierno Collboni admitía la “dificultad” de unir en el Puerto de Barcelona a todos los equipos, uno de los objetivos de la Copa América para el 2026; “es cierto que en algunos puertos nuevos puedes conseguir que todas las bases estén juntas una detrás de otra”, concretó el concejal al respecto.
